Destacado, Estados Unidos

Ariana Fajardo abandona el cargo de fiscal federal del sur de la Florida

Al igual que otros fiscales federales de alto nivel en EEUU, Ariana Fajardo, de 48 años, debe dejar el cargo como parte de la transición del poder presidencial, reportó elnuevoherald Fajardo se enfrentó a su primera crisis en el otoño de 2018: una investigación de terrorismo en torno a un indigente que estaba enviando burdas […]

Por Allan Brito
Ariana Fajardo abandona el cargo de fiscal federal del sur de la Florida
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Al igual que otros fiscales federales de alto nivel en EEUU, Ariana Fajardo, de 48 años, debe dejar el cargo como parte de la transición del poder presidencial, reportó elnuevoherald

Fajardo se enfrentó a su primera crisis en el otoño de 2018: una investigación de terrorismo en torno a un indigente que estaba enviando burdas bombas caseras por correo desde el sur de la Florida a políticos en el noreste,

Su oficina, junto con el FBI, se abalanzó sobre el caso.

Pero mientras la investigación llegaba a los encabezados nacionales, recibió llamadas telefónicas consecutivas del fiscal federal en Manhattan y del subsecretario de Justicia en Washington, D.C.

“Retírense”, le dijeron ambos, el caso sería procesado por el Distrito Sur de Nueva York, conocido como el “distrito soberano” por su larga tradición de poder e independencia entre las 94 fiscalías federales del país.

“Ellos se llevaron el caso”, declaró Fajardo al Miami Herald el miércoles.
Fajardo fue nominada por el presidente Donald Trump y se convirtió en la primera mujer en fungir como fiscal federal en Miami, y ahora deja el cargo el viernes tras la derrota de Trump ante el demócrata Joe Biden
Para Fajardo, ex jueza de circuito de Miami-Dade y fiscal estatal adjunta, el juego de poder de Nueva York fue una “llaga” inmediata para la recién llegada federal.
https://twitter.com/SDFLnews/status/1375536661828894723?s=20
Argumentó que el autor era local y que las bombas enviadas por correo se habían fabricado aquí, por lo que el caso correspondía al sur de la Florida, pero el Distrito Sur de Nueva York la superó abriendo primero un gran jurado para presentar el caso de terrorismo. Algunos de los correos bomba fueron recibidos por el ex presidente Barack Obama y otros políticos en D.C., Nueva York y otros lugares.

El mandato de Fajardo como fiscal federal se enfrentó a retos mucho más inesperados, desde el cierre del gobierno federal hasta la pandemia del COVID-19.

Después de que el caso de las bombas caseras de César Sayoc fuera tomado por los fiscales de Nueva York, el gobierno federal cerró y dejó a su personal de más de 500 fiscales y asistentes preguntándose cuándo recibirían un cheque de pago o si serían despedidos como empleados no esenciales.

El cierre de 35 días, que duró desde finales de diciembre de 2018 hasta finales de enero de 2019, sería el más largo en la historia del gobierno de Estados Unidos.

Fajardo solo llevaba unos meses en el puesto y aún intentaba aprender los nombres de los empleados, los códigos penales federales y la estructura burocrática de la extensa oficina que se extiende desde Cayo Hueso hasta Fort Pierce.

“La gente trabajaba pero no cobraba”, recordó, y dijo que fue un momento de baja moral para la oficina.

Pero cuando la fiscalía se recuperó, Fajardo dijo que se propuso cambiar la jerarquía y la contratación de la Fiscalía General Federal del Sur de la Florida, dominada durante mucho tiempo por hombres; al principio con la ayuda del fiscal federal saliente Ben Greenberg, quien trabajó durante un breve periodo como su primer asistente, y luego de otro fiscal de carrera, Tony González, quien lo reemplazó.

Fajardo, criada en el seno de una familia cubana en Hialeah, eligió a dedo a una docena de mujeres y hombres hispanos, afroamericanos, asiáticos, indios y blancos para ocupar puestos ejecutivos y de supervisión. “Sabía que quería una mayor representación en nuestra oficina que reflejara la comunidad”, dijo.

Su equipo reclutó a abogados civiles y penales con experiencia en juicios en bufetes de abogados o en la Fiscalía del Estado de Miami-Dade, contratando a más de 90 nuevos fiscales en los últimos dos años.

Entre las nuevas contrataciones: dos estadounidenses de origen haitiano, que, aunque es un número pequeño, fue significativo por su falta de presencia en la oficina. Fajardo también reclutó candidatos del grupo legal conservador conocido como la Federalist Society. Esta adquirió una enorme influencia durante la administración de Trump.

Lavado de dinero de Venezuela

Durante ese mismo periodo de dos años, docenas de fiscales veteranos dejaron la Fiscalía Federal en Miami por jubilación o para incorporarse a importantes bufetes de abogados; incluyendo a Michael Nadler, quien había sido el fiscal principal en una serie de casos enormes de lavado de dinero de Venezuela.

Fajardo creó una nueva sección de lavado de dinero fuera del ámbito tradicional de los narcóticos para apuntar a los millones contaminados que fluyen en los sectores bancario, empresarial e inmobiliario del sur de la Florida gracias a la corrupción y la malversación extranjeras. Dijo que el grupo de trabajo de la oficina en esta área tuvo que ser reconstruido en torno a expertos en delitos financieros debido a la pérdida de Nadler y otros fiscales clave en los últimos años.

Fajardo dijo que reconoció la necesidad de una sección especial de lavado de dinero con solo mirar todos los nuevos rascacielos de condominios desde Miami hasta Aventura. “Todos estos edificios se están construyendo, pero ¿quiénes son los compradores?”, recordó haber pensado. “Parece que nadie vive en ellos. Todos están a oscuras por la noche”.

Relacionados