Caos en hospital de Daytona Beach: Disparó a su esposo que estaba en estado terminal

No es el capítulo de una novela, sucedió en la vida real. El sábado en la tarde ocurrió un suceso en un hospital de Daytona Beach que deja muchas interrogantes.

Una mujer se escabulló en el hospital Advent Health, ingresó en una habitación y accionó un arma de fuego en reiteradas ocasiones contra su esposo, quien se encontraba recluido desde hace varias semanas en un estado terminal.

El suceso conmocionó a todos los presentes. Funcionarios de seguridad se dieron a la tarea de desalojar a los pacientes que se encontraban en el piso once, tarea nada sencilla, tomando en cuenta que muchos de ellos estaban conectados a máquinas y en delicado estado de salud.

Tras esconderse en una habitación por varias horas y conversar con el negociador de la policía, la mujer decidió entregarse a las autoridades pertinentes.

Jakari E. Young, jefe de la policía de Daytona Beach, compareció ante los medios de comunicación y emitió un comunicado, relatando lo acontecido. El acto que llevó a la detención de la mujer, se debió a un plan trazado desde hace tres semanas por la víctima, quien pidió que acabasen con su vida si su estado de salud empeoraba.

Young agregó que la víctima no pudo herirse a sí mismo, debido al débil estado de salud en el que se encontraba.

La mujer está bajo custodia y está podría estar esperando un cargo de asesinato en primer grado. “Ella está muy triste, es una situación difícil”, aseguró el oficial.

Aún se desconoce tanto el estado de salud de la víctima por el accionar del arma de fuego y tampoco se sabe cuál enfermedad sufre. Tampoco han averiguado cómo lograron ingresar un arma a las instalaciones del recinto hospitalario.

Caos en el hospital de Daytona Beach

El Dr. Joshua Horenstein, cardiólogo del Advent Health Hospital, relató a la cadena de noticias CNN, que él se encontraba en el departamento de emergencias, cuando escuchó el tiroteo.

“Alguien entró gritando que esto no era un simulacro y que se refugiara”, contó. Se escondió en una sala de suministros con una enfermera. Logró salir de su escondite 90 minutos más tarde.

No fue el primer escenario de estrés para Horenstein, quien en 2006 fue protagonista de otro episodio con armas de fuego. Relató que en ese año vivió una experiencia similar, cuando en medio de una pasantía en el hospital Scripps Green de California, ocurrió un tiroteo.