Rebeka Jones, científica de Florida que fue despedida por el Departamento de salud en mayo pasado, lanzó su propio contador de casos de coronavirus en el estado.
Por redacción MiamiDiario
“Quería crear una aplicación que tuviera un contador que entregara datos y ayudara a las personas a hacerse la prueba y ayudarles a obtener los recursos que necesitan de su comunidad”, dijo Jones, de 30 años, a The Post. “Y eso es lo que terminé construyendo con este nuevo tablero”.
Aunque similar en apariencia, los datos presentados por Jones en su tablero son marcadamente diferentes a los datos del Departamento de Salud.
En el contador de Jones muestra que más de 85,000 personas en Florida han dado positivo por COVID-19 desde el 1 de marzo, mientras que el Tablero del Departamento de Salud reporta más de 77,000 casos hasta el lunes.
El contador de Jones, el número de personas evaluadas también es significativamente menor que la cifra oficial.
El número de muertes de Jones es ligeramente mayor porque cuenta a los no residentes que murieron mientras estaban en Florida. El estado no lo hace.
Jones ha afirmado que el sitio del estado cuenta menos que el total de infecciones del estado y cuenta el número de personas evaluadas en un esfuerzo por defender la reapertura de la economía antes.
Había sido reprendida varias veces y finalmente despedida por violar la política del Departamento de Salud al hacer comentarios públicos sobre la información, según muestran los registros estatales.
Sus comentarios en correos electrónicos a investigadores, entrevistas con un puñado de medios de comunicación y publicaciones de blog buscaban sembrar dudas sobre la credibilidad de los datos después de su despido.
Los funcionarios de salud estatales negaron enérgicamente cualquier problema con la precisión de la información, ya que el gobernador Ron DeSantis buscaba presentar un caso basado en datos para una reapertura paso a paso de la maltratada economía del estado siguiendo órdenes más seguras en el hogar.
El gobernador republicano arremetió en una conferencia de prensa el mes pasado diciendo que Jones tenía un patrón de “insubordinación” y que debería haber sido despedida hace meses.
Jones no ha alegado ninguna alteración de los datos sobre muertes, vigilancia de síntomas hospitalarios, hospitalizaciones por COVID-19, número de nuevos casos confirmados o tasas de pruebas generales, elementos centrales de cualquier evaluación del brote y de los criterios federales para la reapertura.
Y Jones reconoce que Florida ha sido relativamente transparente, por lo que ella misma reclama algo de crédito, y relativamente exitosa en el control de la pandemia.
Sin embargo, ella sugirió que los gerentes del Departamento de Salud querían que manipulara la información para pintar una imagen más atractiva y que ella la rechazó.
En la entrevista de CNN, le preguntaron a Jones si fue retirada debido a un problema de actitud.
“De alguna manera, sí, si negarse a engañar al público durante una crisis de salud es insubordinación, entonces usaré esa insignia con honor”, respondió Jones.
Desde mucho antes
Dijo que las autoridades le pidieron que borrara datos que mostraban que algunos residentes dieron positivo por el coronavirus en enero, a pesar de que DeSantis aseguró a los residentes en marzo que no había evidencia de propagación de la comunidad, según The Post. Un portavoz del Departamento de Salud dijo que las fechas de enero a las que Jones hizo referencia no son necesarias cuando una persona dio positivo por el virus.
“Los epidemiólogos recopilan información que informa al Departamento de Salud sobre los síntomas, los contactos y la ubicación de un individuo donde pueden haber adquirido COVID-19”, dijo el portavoz Alberto Moscoso. “La primera fecha de entrada en respuesta a cualquier pregunta, relacionada con COVID o no, se designa como la fecha del evento”.
El recuento de casos en el tablero de Jones es más alto, dijo, porque incluye a las personas que han dado positivo por anticuerpos o proteínas que indican que el virus ha estado en el cuerpo de alguien. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, “un mayor porcentaje de resultados positivos pueden ser falsos positivos cuando las pruebas [de anticuerpos] se usan en personas que viven o trabajan en un área donde muy pocas personas han tenido COVID-19″.
Jones defiende sus estadísticas
“Si estás creando algo que simplemente presenta una visión muy limitada de una situación compleja y matizada pero que afecta la vida de todos, entonces no les estás permitiendo actuar, tomar un poco de control sobre lo que están pasando “, dijo sobre el tablero del departamento de salud del estado.
Jones, que vive en Tallahassee, le dijo a The Post que planea mantener su tablero en funcionamiento el mayor tiempo posible porque cree que da más contexto al flujo interminable de datos.
Una página de GoFundMe creada para ayudar a financiar su nuevo sitio ha recaudado más de $ 150,000 hasta el lunes por la tarde.
Para ingresar a la página del contador de Jones puedes hacer click en este enlace
Con información de news4jax
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