Coronavirus en Florida vuelve a causar estragos

Las admisiones de pacientes con coronavirus continúan aumentando en los hospitales de Florida, con al menos dos áreas en el estado superando los picos anteriores del aumento repentino del verano pasado, lo que provocó que los funcionarios locales pidieran al gobernador que declarara una emergencia.

En Jacksonville, los directivos de uno de los hospitales más grandes señaló que estaban a máxima capacidad, sus centros de emergencia también en un punto crítico mientras el estado lidiaba con la nueva y más infecciosa variante delta del virus COVID-19.

En el condado de Brevard, dos hospitales comenzaron a instalar carpas de tratamiento en sus departamentos de emergencia. Y en un parque de Fort Lauderdale, una larga fila de autos serpenteaba alrededor de un sitio de pruebas, recordando las primeras semanas de la pandemia del año pasado. Reseñó NewsBreak.

Los hospitales de Florida reportaron más de 8,900 pacientes con COVID-19 el jueves, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. La Asociación de Hospitales de Florida dijo que el estado alcanzó un máximo de 10.179 casos en julio pasado.

El número de pacientes el jueves fue cinco veces mayor que hace un mes, y rápidamente subió de un poco menos de 5.500 en solo una semana.

“Lo que es extraordinario es la velocidad a la que actualmente estamos viendo nuevos casos”, dijo el Dr. Vincent Hsu, director ejecutivo de prevención de infecciones y epidemiólogo hospitalario de AdventHealth en Orlando. “La pendiente es bastante empinada y no hemos visto el final. Esto todavía está por llegar “.

El rápido aumento de hospitalizaciones y casos ha llevado a los funcionarios de Miami-Dade y Orlando a emitir nuevas órdenes que requieren máscaras en los edificios interiores del condado. El alcalde del condado de Orange, hogar de Walt Disney World, está obligando a todos los empleados del condado no sindicalizados a vacunarse antes de agosto.

Y Walt Disney World también anunció esta semana que nuevamente requeriría el uso de máscaras en interiores.

Solo el 48 por ciento de la población del estado está completamente vacunada, y los hospitales dicen que la gran mayoría de los pacientes con COVID-19 no están vacunados.