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DeSantis firmó controvertido proyecto destinado a reprimir las protestas violentas y descontroladas en Florida

El gobernador Ron DeSantis firmó un controvertido proyecto de ley de orden público destinado a reprimir las protestas violentas y descontroladas. DeSantis anunció la legislación el pasado mes de septiembre tras las protestas que se produjeron en todo el país a raíz de la muerte en mayo de George Floyd, un hombre negro de 36 […]

Por Allan Brito
DeSantis firmó controvertido proyecto destinado a reprimir las protestas violentas y descontroladas en Florida
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El gobernador Ron DeSantis firmó un controvertido proyecto de ley de orden público destinado a reprimir las protestas violentas y descontroladas.

DeSantis anunció la legislación el pasado mes de septiembre tras las protestas que se produjeron en todo el país a raíz de la muerte en mayo de George Floyd, un hombre negro de 36 años que murió después de que el entonces policía de Minneapolis Derek Chauvin se arrodillara sobre el cuello de Floyd durante al menos ocho minutos, reportó News Break.

Vimos desórdenes y disturbios realmente sin precedentes durante el verano de 2020 y dijimos que eso no iba a ocurrir aquí en el estado de Florida. Queríamos asegurarnos de que pudiéramos proteger a la gente de nuestro gran estado, los negocios y las propiedades de la gente, contra cualquier tipo de actividad mafiosa y asambleas violentas”, dijo DeSantis antes de firmar la legislación en una ceremonia en Winter Haven.

La medida, “Combatir los desórdenes públicos”, crea una nueva responsabilidad por la “intimidación de las turbas” y aumenta las penas por la violencia relacionada con los disturbios y los saqueos.

“Creo que es notable, si se observa la amplitud de esta legislación, que es la más fuerte contra los disturbios y a favor de la aplicación de la ley en el país. No hay nada que se le parezca”, dijo DeSantis.

DeSantis y otros republicanos dicen que las medidas eran necesarias para acabar con las protestas violentas. Los demócratas y los grupos de derechos civiles, sin embargo, replicaron que infringe los derechos de la Primera Enmienda y que conducirá desproporcionadamente a la represión de los manifestantes negros.

La medida también impide a los gobiernos locales desfinanciar a las fuerzas del orden.

“Podremos detenerlo a nivel estatal. Y si miras algunos de los lugares que han hecho esto ya han visto aumentar la delincuencia, incluso sólo desviando parte de la financiación a esto. Es una teoría insana y no se va a permitir nunca que se lleve a cabo en el estado de Florida y este proyecto de ley nos da las herramientas para asegurarnos de que eso no ocurra”, dijo DeSantis.

El gobernador dijo que la legislación también hace responsable al gobierno local.

Como vimos el verano pasado, algunos de los gobiernos locales estaban diciendo, no necesariamente en Florida, sino en todo el país, básicamente diciendo a esta gente que se retirara, diciendo a la policía que se retirara mientras las ciudades se quemaban, mientras los negocios se quemaban, mientras la gente estaba siendo perjudicada. Eso es una negligencia del deber. Nuestro proyecto de ley dice, y yo lo promulgaré, que si se hace dejación de funciones como gobierno local, si se dice a las fuerzas del orden que se retiren, entonces se es responsable de los daños ocasionados. Si alguien ha sido perjudicado o su propiedad ha sido destruida, entonces pueden demandarte para obtener una compensación”, dijo DeSantis.

También hay sanciones para las personas que toman las carreteras o autopistas.

“Piénsalo. Estás conduciendo a casa desde el trabajo y, de repente, tienes gente por ahí cerrando una carretera. Trabajamos duro para asegurarnos de que eso no ocurra en Florida. Cuando empiezan a hacer eso tiene que haber sanciones rápidas, eso es algo que simplemente no puede suceder”, dijo DeSantis.

La legislación también protege los monumentos y crea una defensa para las personas que hieren o matan a manifestantes violentos.

DeSantis dijo que la nueva ley ayudará a que Florida no se convierta en un lugar como Portland, donde los disturbios violentos parecen ser una ocurrencia diaria.

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