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El relato de una familia que logró sobrevivir al derrumbe en Surfside

Llamar a su escape de Champlain Towers desgarradora sería quedarse corto. Nir y dos de sus hijos, Gabe de 25 años y Chani de 15, lograron escapar de su apartamento del primer piso segundos antes de que el edificio en Surfside se derrumbara y aplastara su unidad. “Cada día es un nuevo día y siento […]

Por Allan Brito
El relato de una familia que logró sobrevivir al derrumbe en Surfside
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Llamar a su escape de Champlain Towers desgarradora sería quedarse corto. Nir y dos de sus hijos, Gabe de 25 años y Chani de 15, lograron escapar de su apartamento del primer piso segundos antes de que el edificio en Surfside se derrumbara y aplastara su unidad.

“Cada día es un nuevo día y siento que hay una razón, no sabemos la razón, pero hay una razón por la que estamos pasando por esto en nuestras vidas, y estoy feliz todos los días”, dijo Sara Nir, quien evitó por poco morir en el colapso de las Torres Champlain con su familia. 

Salieron corriendo con la ropa que vestían y nada más. “Así que llegué a casa como a las 11 en punto y había ruidos, siempre escucho ruidos de construcción, golpes, no debería preocuparme, no va a pasar nada”, dijo Chani. 

“Entonces empiezo a escuchar golpes en las paredes. Estaba segura de que la gente estaba colgando cuadros, y luego fue más intenso, y luego alrededor de la 1:10, la pared sobre mí se derrumbó ”, dijo Sara, describiendo el momento en que sus campanas de alarma internas comenzaron a sonar. “Y yo dije, ¡corre, es un terremoto, corre, corre, corre, rápido!”.

Chani acababa de salir de la ducha y estaba en bata de baño, pero no había tiempo para vestirse. 

Escuchamos como otro boom, mientras aún estábamos en el vestíbulo, salimos corriendo y vemos que toda el área de la piscina desapareció”, dijo Chani. 

Agregando que “Y dije que no hay tiempo, tenemos que correr porque este terreno ya no es seguro, simplemente salimos del edificio, cruzamos Collins y de repente un gran boom, era una gran nube, no vi nada, no pude respirar, dije que eso es todo, este es el fin del mundo”.

Mientras Chani compartía su historia, dijo que se sentía increíblemente afortunada de estar parada allí en la acera, con una pancarta de “Surfside Strong” colgando de un balcón encima de ella.

“Sí, sí, tenemos que agradecer a Dios todos los días que estamos vivos”, reflexionó. 

“Estamos vivos y agradecidos y realmente agradecidos por lo que tenemos, pero estamos en un trauma, necesitamos apreciar lo que tenemos y todos los días, todas las mañanas, debemos agradecer a Dios por estar vivos”, añadió Sara.

Nunca dé por sentado un solo día, dijo Sara repetidamente durante una entrevista, y aprecie cada momento. Chani dice que ella y su familia estarán eternamente agradecidos con la comunidad, la Cruz Roja y las otras agencias benéficas que los han estado ayudando mientras comienzan la tarea de reconstruir sus vidas desde cero, después de la tragedia de Surfside.

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