Una revisión independiente del desafortunado vuelo espacial de Boeing, Starliner, encontró que se perdieron oportunidades de prueba antes del lanzamiento y la próxima vez que Starliner vuele sigue siendo desconocida, dijeron el viernes funcionarios de Boeing y de la NASA al revelar los resultados de su investigación conjunta sobre el vuelo de prueba orbital de Starliner en diciembre.
Por Redacción Miami Diario
El CST-100 Starliner de Boeing fue lanzado desde Cabo Cañaveral en diciembre sin astronautas a bordo. La nave se dirigió a la Estación Espacial Internacional para probar sus sistemas de lanzamiento, acoplamiento y aterrizaje, pero la nave se vio obligada a regresar a la Tierra 48 horas después del lanzamiento cuando perdió una maniobra crítica para alcanzar a la estación espacial.
La NASA dijo previamente que tres problemas principales fueron descubiertos durante el vuelo de prueba orbital de Boeing en diciembre, dos estaban relacionados con errores de software y el tercero era un problema de comunicación intermitente entre la nave espacial y los controladores en tierra.
El viernes, Boeing y los funcionarios de la NASA dijeron que un equipo de revisión independiente ha hecho más de 60 recomendaciones correctivas a Boeing e identificó tres problemas específicos que deben ser abordados antes de que la nave espacial pueda volar de nuevo.
El Administrador Asociado de la NASA para Exploración Humana y Operaciones Doug Loverro dijo, específicamente, que el equipo de revisión encontró que Boeing no realizó todas las pruebas de software posibles antes del primer vuelo.
“Hay cuatro formas en que el software podría haber funcionado”, dijo Loverro. “No probamos las cuatro formas en que podría haber funcionado”.
El equipo de revisión independiente encontró que se dio demasiada autoridad a la junta de software antes de que se hicieran cambios en el software de la nave espacial. Esos cambios deberían haber sido llevados a la junta de revisión de diseño, dijo Loverro.
La semana pasada, el director del programa de Boeing Starliner, John Mulholland, dijo que Boeing probará el software de la nave espacial de principio a fin antes del lanzamiento.
La Gerente del Programa de Tripulación Comercial de la NASA, Kathy Lueders, dijo que la próxima vez Boeing presentará un plan para corregir los problemas descubiertos durante la revisión y presentar ese plan a la NASA, posiblemente a finales de mes. La NASA entonces tendrá que aprobar o recomendar cambios al plan.
Desde 2011, los EE.UU. ha dependido de los cohetes rusos para llevar a su tripulación a la estación espacial.
La NASA seleccionó a Boeing y a SpaceX para construir naves espaciales tripuladas para volar astronautas estadounidenses como parte del programa de Tripulación Comercial, otorgando a las empresas privadas un total de 6.400 millones de dólares. Ambas compañías han experimentado retrasos mientras trabajan para certificar sus cápsulas para llevar a la tripulación a la ISS y traerlas a casa de forma segura.
Debido a los retrasos del programa, la NASA está negociando con Rusia para comprar asientos extra para llevar astronautas a la ISS.
El vuelo de prueba orbital de Boeing Starliner del 20 de diciembre fue parte del proceso de certificación de la nave para llevar astronautas de la NASA.
Fuente: Click Orlando
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