Luis Manuel Otero, líder del grupo de artistas cubanos Movimiento San Isidro, está prácticamente incomunicado en el Hospital Calixto García de La Habana desde el 2 de mayo. Estaba en huelga de hambre de protesta y fue sacado de su casa de madrugada por la fuerza en una redada de la Seguridad del Estado.
Las autoridades sanitarias de Cuba informaron que había sido trasladado a un hospital por “inanición voluntaria referida,” pero sin constatarse signos de desnutrición y con parámetros clínicos y bioquímicos normales (publicaron los supuestos resultados de laboratorio).
En más de tres semanas, solo ha recibido visitas muy restringidas de familiares que deben estar bajo mucha presión por parte del aparato de la Seguridad del Estado. Hay fuertes indicios de que Otero está siendo drogado y posiblemente sometido a terapia electroconvulsiva (TEC) (informado desde el hospital). Un video publicado por las autoridades el 20 de mayo, lo muestra visiblemente deteriorado y fuera de carácter.
El régimen revolucionario cubano tiene una larga y bien documentada historia de confinar en instituciones psiquiátricas a disidentes considerados amenazas a la “seguridad del Estado” y de usar psicofármacos y terapia de electrochoque para castigarlos, intimidarlos, desmoralizarlos y coaccionarlos.
Amnistía Internacional nombró a Otero preso de conciencia el 21 de mayo (por tercera vez) e instó a las autoridades cubanas a que lo liberaran de forma inmediata e incondicional.
Mientras tanto, los compañeros artistas de Otero, así como muchos activistas de derechos humanos y periodistas independientes no han podido salir de sus hogares durante semanas. Cinco activistas que realizaron una protesta pacífica el 30 de abril en la calle Obispo de La Habana en apoyo de su huelga de hambre y una periodista, siguen detenidos y en espera de juicio por “desorden público y resistencia.” Hace tres días que la periodista independiente Mary Karla Ares está siendo torturada sin permitírsele dormir con interrogatorios cada 5 a 10 minutos.
El rapero Denis Solís, cuyo arresto y sentencia a ocho meses de prisión por desacato motivaron una huelga de hambre colectiva en noviembre pasado, sigue en prisión y su familia está bajo vigilancia.
¿Qué se puede hacer?
Pedir a la Asociación Mundial de Psiquiatría que expulse a Cuba y a las asociaciones médicas y psiquiátricas de países democráticos que investiguen y denuncien el abuso psiquiátrico en Cuba.
Pedir a los gobiernos de países libres que:
1. Exijan una evaluación médica independiente de Otero y su liberación inmediata si no requiere hospitalización.
2. Exijan que Otero tenga acceso a comunicaciones telefónicas y visitas periódicas de familiares, amigos, periodistas y diplomáticos.
3. Exijan la liberación del rapero Denis Solis y de los seis activistas encarcelados: Mary Karla Ares, Esteban Rodríguez, Thais Mailén Franco, Inti Soto Romero, Ángel Cuza y Yuisan Cancio.
4. Condicionen las relaciones con Cuba y la asistencia a Cuba al respeto de los derechos humanos.
Pedir a los medios internacionales, especialmente a los que tienen corresponsales en Cuba, que rechacen las restricciones del gobierno cubano y den a conocer la situación de Luis Manuel Otero y las restricciones a la libertad de expresión en Cuba. Comuníquese con Reuters, CNN, The New York Times y otros.
Escriba al presidente cubano Miguel Díaz Canel a [email protected].
Más sobre este tema
- Médico de Florida demanda a Airbnb tras alquilar una propiedad de forma ilegal en Cuba
- La genuina reacción de una cubana al ingresar a un supermercado en Miami por primera vez
- Posponen audiencia del exdiplomático de Estados Unidos acusado de espionaje
- Tres reuniones en Brickell y una confesión: Espía cubano en Miami cayó en trampa del FBI
- “Ahora soy patria o muerte”: Implicado en tiroteo de Brickell huyó a Cuba
