Exilio es la reserva más importante de la nación cubana en el extranjero

Indagar los valores de la nación cubana, resulta pertinente para el exilio más longevo que ha conocido el hemisferio.

Por  Cecilia Pachano/ MiamiDiario

Pedro Corzo, periodista e historiador expuso en el I Congreso de la Academia de la Historia de Cuba en el Exilio (AHCE) su ponencia “Indagación para la restitución de los valores de la nación cubana”.

A su juicio el régimen de Cuba es el  subversor más grande que ha tenido América Latina, pues de acuerdo a sus investigaciones ha intervenido en  todos los países latinoamericanos, y hoy es la raíz de las crisis que atraviesan Nicaragua y Venezuela.

El ponente define el proceso histórico cubano como el debate entre la mediación y el  hegemonismo. Con  la presencia de numerosos caudillos como factores de perturbación, entre los que citó a José Miguel Gómez,  Mario García Menocal , Fulgencio Batista y Fidel Castro.

Explicó que a eso se suma el culto cuasi religioso que se le rinde al término revolución desde 1933  y el rol del estudiantado cubano en la deposición del gobierno del turno, y en los posteriores movimientos seudogansteriles en los que medró Fidel Castro.

Para Corzo  el que se dejó seducir por Fidel Castro lo hizo “porque le dio la gana, porque en el año 59 hubo señales claras de lo que se aproximaba”.

Histerismo colectivo

“Creo oportuna una profunda indagación, en mi opinión lo peor de todo fue el histerismo colectivo del pueblo cubano. Un pueblo que salía a la calle a pedir el paredón para cualquiera”.  Obnubilación que no solo sufrió el pueblo llano, “estoy hablando de politicos e intelectuales”.

A juicio de Corzo, Fidel Castro “es la exaltación de todos nuestros defectos y por ello mismo quien mejor conocía los defectos que teníamos como pueblo”.

A lo largo de su ponencia abordó el engolosinamiento que hubo a lo externo de Cuba con la revolución de Fidel “llamó tanto la atención que los fusilamientos fueron ignorados” y Castro tuvo la capacidad de vender una serie de escaramuzas como una epopeya.

Para lo cual se apoyo en el poderoso desarrollo comuicacional que tenía Cuba para la época. “Teníamos 160 emisoras de radio 23 estaciones de televisión muchísimos periódicos y cuatro revistas de circulación internacional. Esos medios fueron habilmente utilizados por la dictadura”.

Se refirió a la asociación con la URSS , “Tenemos el triste orgullo de ser el último ejército imperial de habla hispana en el mundo, ese trabajo servil que Castro le prestó la URSS“, y la capacidad de sobrevivir a su desintegración, mimetizándose y asociándose con factores de la izquierda en el Foro de Sao Paulo.

Pero a pesar de la larga permanencia de la dictadura castrista,”lo bueno de esto es que un sector del pueblo cubano nunca se ha dado por vencido“. Ni dentro, ni fuera de la isla.

“No creo que América Latina haya sido el albergue de un exilio tan longevo como el nuestro, cuando digo exilio no estoy hablando de emigrantes, exiliado es aquella persona que contantemente está haciendo algo para el cambio en su país. Tenemos un exilio que casi cumple 60 años denunciando la tiranía”.

Es su opinión este exilio, por su característica, trasciende al de la década del 90 y es la reserva más importante de la nación cubana en el extranjero. “Demuestra que seguimos comprometidos, seguimos tratando de aportar al fin de la tiranía”.

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