En los Estados Unidos, el jugo de naranja es sinónimo de Florida. Puede ser una sorpresa, entonces, mirar la letra pequeña en una botella de Tropicana y Simply Orange y descubrir que, después de todo, parte del producto no es del estado Sunshine, es de Brasil.
Por Redacción Miami Diario
El jugo de naranja es un gran negocio en Brasil. Después de una serie de heladas que azotaron la Florida en la década de 1960 y devastaron mucho naranjales, Brasil logró cubrir ese déficit con su propio suministro, comenzando con el jugo de naranja concentrado congelado.
Luego, en 2005, la enfermedad del enverdecimiento de los cítricos, que se había extendido por todo el mundo desde China, llegó a Miami. Dejó no comestibles a las naranjas en los arboledas, lo que resultó en una disminución del 55 por ciento en la producción, durante la siguiente década. En respuesta, los productores de naranjas de Florida aumentaron los precios de OJ en casi $ 2 por galón , lo que provocó que los embotelladores recurrieran al OJ brasileño más barato.
En la actualidad, más del 50 por ciento de todo el jugo de naranja embotellado por grandes empresas como Tropicana es suministrado por una empresa brasileña, enviada en camiones cisterna especializados en jugos de fruta desde el Puerto de Santos en Sao Paulo.
En 2017, este mercado de exportación de OJ valía $ 1,4 mil millones. Las empresas brasileñas de jugo de naranja utilizaron esta afluencia de efectivo para ingresar a los EE. UU. y comprar las instalaciones de producción de Florida, lo que convierte a Brasil en un patrocinador financiero de gran parte del jugo de naranja de Estados Unidos.
Sin embargo, el jugo de naranja brasileño más barato tiene algunos costos serios. Un informe de 2015 de la organización activista Supply Chanelle calificó a la industria de recolección de naranja en Brasil como “un sistema moderno de esclavitud”.
Los trabajadores a veces no reciben pago durante semanas y quedan atrapados en contratos de trabajo que los mantienen endeudados y atrapados en la plantación, dice el informe.
El informe también alega que el alto uso de pesticidas conduce a condiciones de trabajo inseguras e incluso a la muerte. Supply Cha! Nge afirma que el jugo de naranja producido en estas condiciones termina en botellas Simply Orange, Tropicana y Minute Maid.
Exportadores consultados
CNBC contactó a varios de los principales exportadores de OJ de Brasil: Citrosuco, Cutrale y Louis Dreyfus Co., y dos importantes minoristas de OJ en Estados Unidos: Coca-Cola y PepsiCo, para que comentaran sobre los reclamos del informe.
Citrosuco dijo a CNBC que “no reconoce ninguna condición de trabajo análoga a la esclavitud en sus relaciones y enfatiza que no está de acuerdo con tales prácticas. La compañía se asegura de que cumpla estrictamente con la legislación laboral con respecto a todos sus empleados”.
Cutrale dijo en un comunicado a CNBC que “se esfuerza por cumplir totalmente con las leyes laborales y medioambientales en todos los lugares donde opera. Todos nuestros más de 18.000 trabajadores ganan salarios por encima del salario mínimo por ley, tienen días de descanso semanales, reciben capacitación sólida y son provistos con el equipo de seguridad apropiado “.
Louis Dreyfus Co. no respondió a la solicitud de comentario de CNBC.
Coca-Cola, propietaria de Simply Orange y Minute Maid, no ha respondido a la solicitud de comentario de CNBC. Pero la compañía fue citada en el informe Supply Chanel, diciendo que “no tolera las prácticas documentadas en este estudio. Aunque Coca-Cola regularmente audita y controla directamente las empresas de zumos y las plantaciones que posee, esto no incluye subcontratistas. ”
Pepsico, dueña de Tropicana, no respondió a la solicitud de comentario de CNBC.
Exportaciones en peligro
Recientemente, los aranceles y la guerra comercial del presidente Donald Trump han provocado que la UE, Canadá y China impongan un impuesto de importación al jugo de naranja estadounidense. Mientras que las exportaciones estadounidenses de OJ han caído un 60 por ciento en los últimos cinco años, los aranceles de algunos de sus principales socios comerciales podrían acabar con la industria de exportación de Estados Unidos, aumentar la dependencia de Brasil y elevar los precios de OJ para los estadounidenses.
Con información de: CNBC
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