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Los consejos de la FDA para usar el microondas de forma segura

El microondas se ha convertido en uno de los artefactos más utilizados en la cocina, su utilidad de descongelar, calentar y otras más le ha dado una importancia razonable en las cocinas del mundo. Sin embargo, se ha hablado mucho de los daños a largo plazo que puede ocasionar, por lo que la Administración de […]

Por Allan Brito
Los consejos de la FDA para usar el microondas de forma segura
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El microondas se ha convertido en uno de los artefactos más utilizados en la cocina, su utilidad de descongelar, calentar y otras más le ha dado una importancia razonable en las cocinas del mundo.

Sin embargo, se ha hablado mucho de los daños a largo plazo que puede ocasionar, por lo que la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) publicó unos consejos importantes para protegernos a la hora de usar microondas.

Los hornos microondas son generalmente seguros cuando se usan correctamente. Pero las personas han experimentado quemaduras y, en casos raros, otras lesiones por radiación de microondas, particularmente en casos que involucran un uso o mantenimiento inadecuado.

A continuación los consejos:

1. Siga las instrucciones de uso del fabricante. Las instrucciones del manual del usuario proporcionan los procedimientos operativos recomendados y las precauciones de seguridad. Por ejemplo, no debe usar algunos hornos microondas cuando están vacíos. Además, no debe calentar agua o líquidos por más tiempo que las instrucciones y recomendaciones del fabricante.

2. Utilice recipientes aptos para microondas. Utilice utensilios de cocina especialmente fabricados para su uso en el horno microondas. Por lo general, no debe usar sartenes de metal o papel de aluminio porque las microondas se reflejan en ellos, lo que hace que los alimentos se cocinen de manera desigual y posiblemente dañen el horno. Y no debe usar algunos recipientes de plástico porque los alimentos calientes pueden hacer que se derrita. La FDA recomienda el uso de recipientes de vidrio, cerámica y plástico etiquetados para uso en hornos microondas.

3. Evite el agua sobrecalentada. “Sobrecalentado” significa que el agua se calienta más allá de su temperatura de ebullición, sin signos de hervir. Si usa un horno de microondas para calentar agua en una taza limpia más allá de la temperatura de ebullición, una leve alteración o movimiento puede hacer que el agua explote violentamente fuera de la taza. Ha habido informes de quemaduras graves en la piel o lesiones por escaldaduras alrededor de las manos y la cara de las personas como resultado de este fenómeno.

Agregar ingredientes como café instantáneo o azúcar al agua antes de calentar reduce en gran medida el riesgo de erupción de agua caliente. También recuerde seguir las instrucciones de calentamiento del fabricante.

4. Compruebe si hay fugas. Debe haber pocos motivos de preocupación por el exceso de radiación de microondas que se escapa de estos hornos, a menos que las bisagras de la puerta, el pestillo o los sellos estén dañados. La FDA recomienda mirar cuidadosamente su horno para ver si existe alguno de estos problemas. La agencia también recomienda que no use un horno si la puerta no se cierra firmemente o está doblada, deformada o dañada de otra manera.

5. No use hornos que parezcan funcionar cuando la puerta está abierta. La FDA monitorea estos aparatos en busca de problemas de seguridad radiológica y ha recibido cada vez más informes sobre hornos microondas que parecen permanecer encendidos y funcionar cuando la puerta está abierta. La FDA recomienda que deje de usar un horno microondas de inmediato si esto sucede.

 

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