Los tres principales peligros en las aguas de Florida

El verano se acerca, pero en Florida hay unos peligros importantes. Aunque se puede decir que hay peligros en todos lados, en las aguas de este estado por su naturaleza evidenciamos algunas situaciones propias con las que hay que tener cuidado.

La ameba comecerebro:

Parece un título de una película de terror, sin embargo es una realidad que existe en Florida y es uno de los peligros más importantes frente al agua. Su nombre oficial es Naegleria Fowleri pero todo el mundo la conoce por el común.

Esta ameba puede provocar una infección en el cerebro. Se encuentra en agua dulce cálida como lagos, estanques, manantiales y, a veces, incluso en parques acuáticos. Entra al cuerpo a través de la nariz, según los Centros para el Control de Enfermedades e Infecciones de EE. UU. Reseña NewsBreak.

Esta ameba es bastante rara, pero el año pasado, en 2020, el Departamento de Salud de Florida emitió una advertencia después de que alguien murió a causa de la infección. Recomiendan evitar el “contacto nasal” con agua que pueda infectarse como técnica de prevención.

Caimanes

Es común convivir con los caimanes en Florida, aparecen en muchos lugares cercanos al agua y aunque para el resto del mundo sea una situación peculiar, en este estado no lo es tanto. Son más activos en los meses de verano. Esto se debe tanto al calor como a la temporada de apareamiento. 

Aunque la probabilidad de ser atacado por un caimán es de una en 3,2 millones , siguen siendo un peligro real si no tienes cuidado.

Algunos consejos de seguridad útiles para los caimanes son:

1. No pasees a tus perros cerca del agua, ya que los caimanes apuntarán a los animales antes que a los humanos.
2. Manténgase alejado de los caimanes y déjelos en paz.
3. No alimente a los caimanes.
4. No nade al anochecer o de noche; solo nadar durante el día.
5. ¡Presta atención a tu entorno y mantente alerta!

Corrientes de resaca

Las corrientes de resaca y las mareas de resaca son muy peligrosas en las playas de Florida. Entre las amebas, los caimanes y las corrientes de resaca, las corrientes de resaca son, con mucho, las más mortíferas. Los socorristas rescatan a miles de personas de las corrientes de resaca cada año, y un promedio de 100 personas mueren cada año por quedar atrapadas en ellas.

Las corrientes de resaca son muy peligrosas porque son fuertes, pueden sorprenderlo y alejar a la gente de la orilla. Es difícil (casi imposible para la mayoría) determinar si hay corrientes de resaca con solo mirar el agua.

Es importante estar atento a las señales de advertencia de la playa. Si hay una señal que advierte sobre mareas fuertes, manténgase fuera del agua. Otros consejos de seguridad incluyen nadar solo en playas con salvavidas y saber cómo salir de las corrientes de resaca si lo atrapan.