Miami atiende la preocupación del cambio climático en la ciudad

Ciudades de todo el mundo -Miami, Phoenix, Atenas y Freetown (Sierra Leona), entre otras- están nombrando a funcionarios jefes de calor para responder al impacto en la salud pública del aumento de las temperaturas globales.

Contratados para hacer frente a las crecientes repercusiones del cambio climático, estos responsables del calor investigan posibles medidas de mitigación del calor a corto y largo plazo y estudian formas de reducir riesgos que van desde el estrés psicológico hasta la muerte prematura, reportó Howstuffworks.

Según la Organización Mundial de la Salud, los fenómenos de temperaturas extremas están aumentando en “frecuencia, duración y magnitud”.

En los últimos años, el número de personas afectadas por las olas de calor se ha elevado a cientos de millones, y algunas poblaciones se ven afectadas de forma desproporcionada debido a su lugar de residencia o a sus ingresos.

¿Qué hace un Jefe de Calor?
La aparición de un puesto de jefe de calor en Miami y otras ciudades se debe en gran medida a una iniciativa del Centro de Resiliencia de la Fundación Adrienne Arsht-Rockefeller y de consejos de fundaciones con mentalidad similar.

El cargo, que estas fundaciones contribuyen a financiar, está diseñado para ayudar a los responsables políticos locales a desarrollar herramientas y estrategias para aliviar la carga del cambio climático, especialmente cuando afecta a las poblaciones más vulnerables del mundo.

El objetivo general del cargo es “ampliar, acelerar y coordinar nuestros esfuerzos para proteger a la gente del calor y salvar vidas”, dijo la alcaldesa de Miami, Daniella Levine Cava, en una declaración de abril de 2021.

Jane Gilbert, que ya había prestado sus servicios al gobierno local en calidad de consultora como primera responsable de la resistencia al calor de Miami, fue nombrada primera responsable del calor de Miami a principios de 2021, prestando servicio tanto al municipio de Miami como al condado de Miami Dade.

A ella le corresponde guiar a los líderes locales, tanto públicos como privados, a través de los inminentes cambios medioambientales. El objetivo es grande: mitigar las consecuencias de la crisis climática.