Niño en Miami llamó al 911 y reveló que su madre lo encerró sin electricidad ni comida

El Departamento de Policía del condado de Miami-Dade actuó con celeridad luego de que un niño de 6 años llamara para reportar una irregularidad en su vivienda. Durante la conversación, afirmó que estaba solo en casa junto a su pequeño hermano de 2 años.

Los oficiales recibieron la llamada el miércoles 3 de enero alrededor de las 9:00 p.m. cuando el menor afirmó que su madre los dejó solos. Ante la situación, la policía rastreó la ubicación de los niños y dio con un complejo de apartamentos ubicado en 200 NW 84th St al sur de Larchmont Gardens Park en West Little River.

Al llegar, los agentes se toparon con una escena repugnante ya que el espacio estaba completamente sucio. Según un reporte hecho por Local10, los menores parecían no haberse bañado en días, no tenían comida y la vivienda estaba sin electricidad.

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Los oficiales determinaron que ambos niños se quedaron en casa sin ningún tipo de supervisión. Dada las deplorables condiciones en las que los encontraron se cree que tenían varios días solos.

La policía halló a la madre de los niños horas después

Frente a esto, la policía comenzó la exhaustiva búsqueda de la progenitora. El niño de 6 años les proporcionó un número telefónico pero la mujer jamás respondió.

Las autoridades rastrearon el área para saber si estaba cerca de la vivienda donde dejó a los niños pero no tuvieron éxito. Para el día jueves 4 de enero, alrededor de las 2:00 p.m. finalmente lograron localizarla y quedó identificada como Demetria Antwonette Spencer de 25 años.

Miembros del Departamento de Policía de Miami-Dade procedieron con el arresto y la trasladaron al Centro Correccional Turner Guilford Knight.

Cargos por negligencia

Antwonette Spencer fue acusada de dos cargos por negligencia infantil y tenencia de licencia de conducir inválida. De acuerdo con los registros de seguridad, un juez le impuso una fianza de $5,000 por sus delitos y seguía detenida el viernes 5 de enero.

En cuanto a los dos menores de edad, ambos quedaron bajo el resguardo del Departamento de Niños y Familias de Florida. Los funcionarios dijeron que ninguno recibió la atención necesaria para mantenerse física y mentalmente saludables.