En las imágenes se ve a la madre de la pequeña, Ana Graham, sacando a su hija Lucia del cochecito e intentando en vano que el bebé expulse la comida que le ha quedado atascada en la garganta.
La madre grita pidiendo ayuda a los transeúntes y a los oficiales de Policía Robert Ayala y Rafael Guadalupe. Ayala agarra al bebé, lo pone bocabajo y le golpea la espalda. Cuando ve que eso no funciona, golpea con más fuerza y finalmente la pequeña expulsa el ‘nugget’.
Ana afirmó a The Palm Beach Post que los oficiales son “ángeles del cielo”. Por su parte, el oficial Ayala dice que su reacción fue instintiva por su entrenamiento. El hecho ocurrió el pasado 21 de julio.
Fuente: 6ABC
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