Internacional

Samuel Araque: pequeño genio pastelero

A lo largo  de la historia  son múltiples y notorios los casos de niños genios que se han destacado en la música como el extraordinario compositor austriaco Wolfgang Amadeus Mozart quien creó su primera obra para orquesta a los cinco años,  y  William James Sidis (1898-1944) el neoyorquino considerado el más inteligente del mundo, según […]

Por Allan Brito
Samuel Araque: pequeño genio pastelero
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

A lo largo  de la historia  son múltiples y notorios los casos de niños genios que se han destacado en la música como el extraordinario compositor austriaco Wolfgang Amadeus Mozart quien creó su primera obra para orquesta a los cinco años,  y  William James Sidis (1898-1944) el neoyorquino considerado el más inteligente del mundo, según se afirma, por su altísimo coeficiente intelectual (IQ  entre 250 y 300), políglota y experto en matemática, por solo poner unos poquísimos ejemplos.

Por: Redacción Miami Diario

Aunque tal vez no en el mismo orden, el pequeño Samuel Araque (7) ha mostrado visos de genialidad. El pequeñito desarrolla una inusual  gran pericia en la cocina, por lo que es el “genio” pastelero más joven  de Colombia y  del planeta en los actuales momentos.

A sus 7 años, Samuel Araque, ha sido calificado como  un “genio” pastelero por  la creación y decoraciones de tortas. Es ganador del título de ser el pastelero más joven del mundo, tal y como publicó Espectáculos TV.

En vez de elegir las habituales figuras de acción, Samuel escogió como juguetes los instrumentos de pastelería, donde ha sido autor de grandes diseños en tortas, especialmente, aquellas que incluyan robots y tortas come galletas, las cuales son sus favoritas.

Este niño ha dirigido su interés al diseño de reposterías en 3D, aunque sus creaciones necesitan más adiestramiento, actualmente se encuentra tomando clases de perfeccionamiento en una escuela de artes en Bogotá.

Desde pequeño, Samuel estuvo ligado al mundo de la masa y el fondant por su padre Víctor Alfonso Araque que también es pastelero, por lo que es una característica que se lleva en los genes y le ha facilitado las herramientas necesarias para su desarrollo.

“Un día Samuel invitó a un amiguito a la casa para enseñarle a decorar una torta, al principio el amiguito estaba entusiasmado, pero después se aburrió y se fue a jugar a con unos muñecos, Samuel lo fue a buscar para decirle que primero había que terminar la torta y luego jugar, pero mi hijo terminó haciendo la torta sólo”, narró su madre, según Pasteleros y Panaderos.

El primer acercamiento del niño en el mundo de pastelería, fue a los 5 años en el negocio de su padre que ante la insistencia del pequeño en hacer algo decidió darle una torta pequeña para que la revistiera de fondant, confiando que sería una actividad demasiado complicada.

“Lo más difícil del fondant, es estirar la masa y cubrir la torta perfecta. Sin explicarle, me dejó asombrado cuando la vi, me le acerque y le puse cuidado”, y tras el momento determinó colgar la foto en sus redes sociales donde impactó a sus seguidores y amigos.

El niño ya tiene bien proyectado sobre lo que quiere ser cuando grande. ““Yo voy hacer una oficina de pasteles, en el primer piso va haber tropics y en el segundo mesas que tengan pasteles”, indicó

Relacionados