“The Villages”, es la comunidad de jubilados más grande de los Estados Unidos, una extensión de hermosas casas, tiendas y lugares de entretenimiento que se anuncia a sí misma como “la ciudad natal más amigable de Florida. “
Por redacción MiamiDiario
Una fila de carros que se acercaban adornados con globos y serpentinas patrióticas pasaban resoplando mientras tocaban la bocina.
“Esto te rejuvenece y te prepara para el próximo mes, para que podamos hacer esto y ganar. Te da esperanza ”, dijo Sara Branscome , jubilada de 60 años a la agencia AP.
¿La razón? Quizás esta frase de otra persona la responda: “Go Biden”.
Este no se trata de un grito que se pueda esperar que resuene en The Villages, y ciertamente no es uno que sea alentador para el presidente Donald Trump.
Los votantes mayores ayudaron a impulsarlo a la Casa Blanca (el Pew Research Center estima que Trump lideró entre los votantes de 65 años o más en 9 puntos porcentuales en 2016) y su campaña esperaba que fueran un baluarte para cimentar un segundo mandato.
Siguen siendo una gran parte del electorado. Pew estima que en todo el país, casi 1 de cada 4 votantes elegibles tendrá 65 años o más. Es el nivel más alto registrado, que se remonta a 1970.
Pero ha habido advertencias de que los votantes mayores están en juego. Sin duda, Trump tiene un apoyo sólido entre los adultos mayores, pero su campaña ha experimentado una caída en su investigación interna, según los asistentes, y algunas encuestas públicas sugieren que el demócrata Joe Biden está por delante o incluso con Trump.
En su mayoría, al parecer, los votantes mayores se han desanimado por el manejo del coronavirus por parte de Trump, que afecta a estos votantes de manera más aguda que a otros. Estaban particularmente alarmados por las actuaciones de Trump en las reuniones informativas diarias del grupo de trabajo en la primavera porque sus comentarios mostraron un manejo desigual de la crisis e inspiraron poca confianza.
El presidente ha intentado apuntalar su popularidad entre los adultos mayores. Ha enfatizado temas de ley y orden, y ha advertido que los demócratas presidirían una ruptura de los suburbios. Ha promovido su política de medicamentos recetados. Y ha mantenido visitas constantes a Florida, después de Maine, el estado con la población más anciana, y ha hecho muchos anuncios allí.
Pero cualquier mejora que vio ahora está en peligro. La propia infección por COVID-19 del presidente ha vuelto a centrar la atención en el virus y su manejo. Si Trump, de 74 años, no puede salvaguardar su propia salud, algunos se preguntan, ¿cómo se puede confiar en él para proteger a otros adultos mayores que son mucho más vulnerables?
En pocos lugares, una caída significativa podría significar la ruina más profundamente que Florida, un estado que Trump casi con certeza debe ganar. Históricamente, los adultos mayores son los votantes más confiables, y Florida es famosa por sus carreras reñidas. Entonces, incluso una caída modesta en el apoyo podría devolver a Trump a la vida privada.
Fuente: AP News
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