Florida

Tras mudarse a Florida dos boricuas están a punto de cumplir sus sueños y metas profesionales

Tras el paso del huracán María miles de jóvenes llegaron a Florida para tener una nueva vida. Tal es el cas de Adriana, una joven de 20 años, según difundió ElNuevoDía Por Redacción Miami Diario La joven Adriana es uno de los 50,000 puertorriqueños que se quedaron en el “ombligo floridiano” para cumplir sus sueños. Otros 50,000 […]

Por Allan Brito
Tras mudarse a Florida dos boricuas están a punto de cumplir sus sueños y metas profesionales
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Tras el paso del huracán María miles de jóvenes llegaron a Florida para tener una nueva vida. Tal es el cas de Adriana, una joven de 20 años, según difundió ElNuevoDía

Por Redacción Miami Diario

La joven Adriana es uno de los 50,000 puertorriqueños que se quedaron en el “ombligo floridiano” para cumplir sus sueños. Otros 50,000 decidieron regresar a Puerto Rico cuando percibieron las primeras señales de estabilidad en la Isla.

Adriana estudiaba en la Escuela Hotelera de San Juan, pero las operaciones del plantel dependían de unos generadores de emergencia que a veces fallaban y eso interrumpió la dinámica educativa durante cuatro meses. Por tal motivo emprendió su viaje a Kissimmee, con mucho temor y expectativas se subió a ese avión que la trajo a Estados Unidos. Y el próximo viernes esta joven de 20 años, natural de Río Piedras, desfilará con su toga para recibir su merecido diploma

Tuvo la suerte de contar con el apoyo de una prima, quien le dio albergue. Sin embargo, la joven recuerda que a las dos semanas la invadió el pánico y estuvo a punto de regresar a la Isla con su madre. Pero se recompuso, se matriculó en un instituto, culminó sus estudios en Artes Culinarias con especialidad en repostería y en una semana tendrá su título del Florida Technical College (FTC).

“Mi sueño es tener una panadería al estilo boricua, pero por lo pronto me conformo con un trabajo en algún hotel o lugar donde pueda poner en práctica lo que aprendí”, dijo. “Estudiar aquí no fue un obstáculo. Aprendí en mi idioma”, contó.

La joven confiesa que ama la repostería pero no es dulcera. Esta joven parte de una premisa fundamental de vida: “Si a uno le da miedo algo, eso no debe pasar de ahí y no te puedes quedar paralizado; la idea es que eso se transforme en algo que te mueva a lograr cosas. Sí, irte de tu país te marca, pero te digo que valió la pena brincar el charco”, aseguró.

Lourdes Caminero, de 22 años y natural de Carolina, también se graduará el viernes. Logró un diploma en facturación de planes médicos luego de llegar a Orlando huyendo de la crisis que se vivía en la ‘Isla del encanto”.

Llegó en un avión militar aprovechando un beneficio que le extendieron a su mamá, que es veterana, y en dos semanas ya estaba estudiando. Su madre la dejó instalada en casa de un familiar y regresó a la Isla. La separación no fue fácil, pero Lourdes no quería desaprovechar la oportunidad que la vida le ofrecía de estudiar en algún instituto en Estados Unidos.

Comentó que verá a su mamá pronto en su graduación. Me encanta Puerto Rico, pero en mi campo tengo más oportunidades aquí”, finalizó.

Con información de: ElNuevoDía

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