Trump propone a Ron DeSantis como candidato presidencial

Cuando se le preguntó al expresidente Donald Trump a quiénes veía como futuros líderes del Partido Republicano, rápidamente listó varios nombres, incluyendo el gobernador de Florida Ron DeSantis y los senadores Josh Hawley y Ted Cruz. Pero claramente no estaba un nombre: Mike Pence.

El exvicepresidente estadounidense está reingresando a la vida pública, mientras contempla la posibilidad de presentarse a la elección presidencial de 2024. Se está sumando a organizaciones conservadoras, escribiendo editoriales, pronunciando discursos y lanzando un grupo que se dedicará a promover los logros del gobierno de Trump, reportó Diario las Américas.

Pero el hecho de que Trump no haya mencionado a Pence durante una entrevista en un podcast este mes indica que el exvicepresidente enfrentará un reto único. Para alguien que construyó una reputación como uno de los partidarios más leales de Trump, Pence es visto ahora con recelo por muchos republicanos por respetar su deber constitucional de aceptar el resultado de las elecciones presidencales el pasado 6 de enero y facilitar una transición pacífica del poder a manos de Joe Biden, una decisión que al parecer, aún mantiene molesto a Trump.

Un nombre que ha resurgido con fuerza entre las filas republicanas durante y después de las elecciones del 3 de noviembre, es el del gobernador de Florida Ron DeSantis, cuya firme postura contra la agenda de la izquierda más liberal dentro de los demócratas ha levantado el respaldo a un fiel aliado del expresidente Trump en los momentos más difíciles tras los comicios presidenciales.

DeSantis con buen perfil

DeSantis se perfila ahora como unos de los futuros líderes republicanos junto a Ted Cruz y Josh Hawley. En caso de que Trump no decidiera postularse, estas tres opciones ya despuntan como posibles candidatos a las primarias para las presidenciales del 2024.

Dos encuestadores republicanos, Tony Fabrizio y Ryan Tyson, hicieron un estudio sobre los posibles candidatos a las primarias republicanas para el 2024. En ambos sondeos, DeSantis fue el preferido por la mayoría (más de 60%) entre Rick Scott y Marco Rubio; incluso, es ahora más popular que Donald Trump en Florida, algo insólito si analizamos que el exmandatario ganó de manera fácil el llamado Estado del Sol.

Según sondeos, la gestión de DeSantis cuenta con el respaldo de un buen número de residentes de Florida en puntos clave: pandemia, economía y el cumplimiento de las leyes, de un estado de Derecho y el apoyo a la policía frente a hechos vandálicos en otros estados gobernados por demócratas. Incluso, después de las elecciones, los disturbios violentos de miembros de la extrema izquierda han continuado en diferentes zonas del país bajo el silencio y anuencia de muchos grandes medios de comunicación.

En el centro del juicio al policía Derek Chauvin, quien enfrenta cargos por homicidio en segundo y tercer grado, así como homicidio involuntario en la muerte del afroamericano George Floyd, junto a otros dos agentes, las autoridades se alistan para violentas manifestaciones que podrían ser similares a las ocurridas a mitad del 2020 durante varios meses.

El gobernador DeSantis y alcaldes impidieron que la Florida se convirtiera en otro foco de destrucción y crímenes perpetrados por grupos radicales como Black Lives Matter y Antifa. Esta postura en línea con el entonces presidente Trump ubicó a DeSantis en el lente republicano y en el de analistas políticos. De hecho, legisladores aprobaron en días recientes una ley que convierte en felonía actos violentos que se cometan durante protestas.

Para ganar en una primaria presidencial republicana, a Pence le convendría resaltar la lealtad que mantuvo hacia Trump y también defender sus decisiones en los últimos días de la administración cuando el Presidente promovió versiones de fraude electoral, que no pudieron ser probadas y luego ocurrieron los acontecimientos en el Capitolio de Washington. Algunos analistas opinan que si alguien puede conseguir ese incómodo equilibrio, es Pence, pero tendría que convencer a los más de 75 millones de votantes que eligieron a Trump como su favorito. En esta tarea, el resto de los posibles contrincantes tienen el camino despejado hasta ahora.

“Quien pueda dar su respaldo a Ted Cruz y convertirse en nominado vicepresidencial de Donald Trump no puede ser descartado”, dijo la estratega republicana Alice Stewart, quien trabajó para la campaña presidencial de Cruz en el 2016 cuando Pence le dio su respaldo. “Él tiene una manera de buscarle la quinta pata al gato que le ha dado réditos en el pasado.”