¿Es suficiente con el seguro de responsabilidad civil para abrir un negocio?
Vivimos en un país de grandes oportunidades que nos permite el crecimiento personal, tanto a través de la educación como del emprendimiento. No es casualidad que en EEUU existan más de 30 millones de negocios, formando su columna vertebral económica.
Ser parte de este inmenso tejido empresarial es el sueño de muchos inmigrantes que buscan la libertad financiera, desarrollando sus propias ideas. Pero antes de llegar a abrir cualquier negocio existe un período de mucho trabajo y grandes privaciones hasta juntar el capital raíz que permita comenzar a materializar el sueño.
Los negocios son muy endebles, sobre todo en su primera etapa, cualquier fallo o error imprevisto puede significar el fin de una idea por buena que sea. Por ello es importante contar con las mejores garantías. Y eso es posible a través del Seguro Comercial.
Dicho seguro incluye cuatro coberturas básicas: la cobertura de propiedad, responsabilidad civil, seguro de automóviles y compensación a los trabajadores. Pero en esta oportunidad quiero detenerme en la cobertura de responsabilidad civil, bajo la cual existen diferentes pólizas.
¿Qué protege la cobertura de responsabilidad civil clásica?
Comúnmente protege de las demandas, juicios y pagos médicos asociados a los daños causados a los clientes por culpa del propio negocio. Es el típico ejemplo del cliente que se resbala, se rompe la pierna y demanda a la tienda.
Generalmente, la cobertura de responsabilidad civil está limitada a $1.000.000 por accidente y un pago máximo anual de $2.000.000 por negocio, independiente del monto del daño que haya causado.
Esta cobertura suele confundirse con otras que pueden estar o no dentro del Seguro Comercial. Por ello es importante señalar que la responsabilidad civil tiene múltiples excepciones, es decir, no cubre los daños ocasionados por el producto hayas elaborado en el negocio. Imagínate que tienes un restaurante y los clientes se enferman tras consumir tu comida. Eso no lo cubre esta cobertura de responsabilidad civil, para ello debes tener una póliza de Seguro de Responsabilidad del Producto.
Tampoco cubre los asesoramientos erróneos en caso de que fueras abogado o asesor, debes tener además una cobertura de Seguro de Responsabilidad Profesional. Ni tampoco cubre las lesiones que sufra un trabajador. De eso se encarga la póliza de Compensación a los Trabajadores.
Solo pretendemos demostrarte que es importante contar con la asesoría especializada a la hora de contratar un seguro comercial porque cada póliza tiene una finalidad muy específica.
Aunque existen paquetes diseñados para las diferentes actividades comerciales, es bueno conocer al detalle qué cubre la póliza que estás pagando y qué no. No permitas que tus ideas sean barridas por un imprevisto.
Llama a Univista Insurance: 305-740-1340
