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Aumento de COVID-19 en campamentos de verano preocupa ante el inicio de clases

Estados Unidos ha visto una ola de brotes de COVID-19 relacionados con campamentos de verano y los funcionarios de salud temen que pueda ser un adelanto de lo que vendrá en el nuevo año escolar. En la zona rural de Hudson, Nueva York, donde el 67% de los mayores de 12 años están completamente vacunados, la noticia de […]

Por Allan Brito
Aumento de COVID-19 en campamentos de verano preocupa ante el inicio de clases
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Estados Unidos ha visto una ola de brotes de COVID-19 relacionados con campamentos de verano y los funcionarios de salud temen que pueda ser un adelanto de lo que vendrá en el nuevo año escolar.

En la zona rural de Hudson, Nueva York, donde el 67% de los mayores de 12 años están completamente vacunados, la noticia de un brote de COVID-19 en el cercano Camp Pontiac ha sacudido a la comunidad. “Para el lunes, eran las 23”, dijo Jack Mabb, director de salud del condado de Columbia. “Para el miércoles, tenía 31 niños, todos en el grupo de edad de siete a 11 años. Así que, por supuesto, no están vacunados”.

Agregando “Nuestra reacción es que no hemos visto esto”.

Se han informado brotes en campamentos de todo el país. En Carolina del Norte, un brote en un campamento se ha relacionado con al menos 75 casos en 17 estados. En Pontiac, casi todos los campistas mayores y el personal fueron completamente vacunados y todos fueron examinados el primer día.

“El COVID-19 puede entrar allí, ya sea la variante o no, a pesar de todo lo que haces”, dijo Mabb. “Creo que es un presagio para el próximo año escolar”.

Este otoño en el condado de Columbia, se asignan fondos escolares para que las enfermeras realicen pruebas rápidas en el lugar. Pero los protocolos para cafeterías, deportes y autobuses están en el aire mientras el condado espera la orientación del estado de Nueva York.

“Si los autobuses todavía tienen que mantenernos a seis pies entre los estudiantes, eso no nos permitirá traer de regreso a todos nuestros estudiantes”, explicó Gladys Cruz, superintendente de Questar III Boces.

“Mi nieta comienza aquí en cinco semanas cuando tenga cinco años”, expresó Mabb, y agregó que estaba preocupado por ella. “Una preocupación que solo crecerá a medida que el verano termine y comience el año escolar“.

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