Fiscal de Florida ebrio abusó de su poder para evitar cargos por DUI

Un destacado fiscal federal de narcóticos, Joseph Ruddy, fue acusado de mal uso de su posición después de un accidente de atropello y fuga en Florida. Según un informe de la Oficina del Inspector General del Departamento de Justicia, el hombre estaba ebrio y chocó con otro vehículo. Luego del impacto abandonó la escena, intentando luego utilizar su estatus para evitar consecuencias.

El 4 de julio de 2023, Ruddy quedó grabado por la cámara corporal de uno de los policías que lo detuvo. En las imágenes se le vio visiblemente desorientado, con dificultades para mantenerse en pie y hablando de manera incoherente.

Según el informe de AP, “Ruddy podía apenas mantenerse en pie, arrastraba las palabras y se apoyaba en la parte trasera de su camioneta para mantener el equilibrio.” A pesar de su estado, el fiscal entregó su tarjeta del Departamento de Justicia a los oficiales que investigaban el accidente.

Leer más: Juez pone fecha al juicio de Derek Rosa, el niño que asesinó a su madre en Hialeah

“Te das cuenta de que cuando revisen las imágenes de mi cámara corporal y vean esto, va a ser realmente malo”, le advirtió entonces uno de los oficiales de Tampa.

Acciones y consecuencias

El informe, publicado el miércoles, no menciona a Ruddy directamente. Sin embargo, confirma que un fiscal adjunto abusó de su posición ofreciendo sus credenciales sin ser solicitado.

La Oficina del Inspector General también encontró que el fiscal “participó en conductas perjudiciales para el gobierno”. Lo calificó así por conducir ebrio y abandonar la escena del accidente.

A pesar de un nivel de alcohol en sangre de 0.17% (el doble del límite legal), a Ruddy no lo acusaron formalmente de atropello y fuga. En lugar de eso, le permitieron declararse culpable de conducción imprudente y le impusieron un año de libertad condicional.

Tras la investigación, removieron a Ruddy de varios casos, pero sigue siendo fiscal adjunto de EE.UU.

¿Repercuciones a futuro?

El Departamento de Justicia, en un comunicado, expresó que “todos los empleados, incluidos los fiscales adjuntos, deben cumplir con los más altos estándares de conducta personal y profesional.”

La oficina del fiscal estatal en Hillsborough, que incluye Tampa, comentó que “no teníamos testigos que pudieran testificar que vieron al Sr. Ruddy al volante durante el incidente”. Esto dificultó la presentación de cargos más graves.

En el momento de su arresto, el fiscal estaba en su hogar, apoyado en su camioneta y con evidencias claras de su estado de embriaguez. Los oficiales observaron que había orinado sobre sí mismo y no podía caminar sin ayuda.

A pesar de sus confesiones y testimonios, el resultado del caso no incluyó cargos de DUI. Una decisión que suscitó críticas y cuestionamientos sobre la aplicación de la justicia en este caso.

Con información de AP