El domingo 10 de marzo, Estados Unidos volverá al horario de verano y todas las personas deberán ajustar sus relojes respectivamente. Con esta nueva modificación las jornadas de sueño y la rutina en sí se ven afectadas.
A partir de las 2:00 a.m. del segundo domingo de marzo se tendrá que adelantar una hora en cada dispositivo de uso diario. No obstante, en la actualidad los smartphones y otros equipos digitales tienen la opción de hacer la actualización de forma automática.
El cambio que marca el inicio de la temporada de verano se mantendrá hasta el mes de noviembre cuando una vez más se deba hacer la modificación. Aunque gran parte del territorio del país tendrá nuevo horario esto no aplica para Hawaii ni parte de Arizona.
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Tampoco se alterará en Puerto Rico, las Islas Vírgenes, las Islas Marianas del Norte, Guam y Samoa Americana.
¿La salud se ve afectada por el cambio de hora en verano?
Como parte del Daylight Saving Time (DTS) o horario boreal, las mañanas tienden a ser mucho más oscuras y la luz se amplía al atardecer. Esto puede desequilibrar el reloj biológico y causar problemas de sueño o complicaciones para conciliarlo sin obviar otras afecciones físicas.
La Asociación Estadounidense del Corazón sostiene que los primeros días del ajuste suelen registrarse casos de personas con ataques cardíacos. También pacientes que presentan accidentes cerebrovasculares durante los días posteriores al cambio.
Este último puede ocurrir a partir de los días lunes (después del segundo domingo del mes) que se hace el cambio. A juicio de la asociación, durante las primeras horas del día se es más propenso sufrir un incidente de este tipo ya que la sangre es más propensa a formar coágulos.
No obstante, el doctor Eduardo Sanchez aclaró que no todas las personas están expuestas a estos riesgos ya que son muy pocas las que sufren por los cambios de horario. Sin embargo, recordó que es importante tratar de dormir las horas correspondientes de manera que el cuerpo se sienta con energía durante las actividades diarias.
No todas las personas se ven afectadas por los cambios de horario pero es importante descansar al menos 7 horas. Foto Freepik.
Recomendaciones básicas para el horario boreal
Como cada año, los especialistas recomiendan a las personas entrenar el cuerpo dos noches antes de hacer el ajuste. De manera que puedan dormir un poco más temprano y tratar de descansar al menos 7 horas de las 8 reglamentarias sin interrupción.
En los dos días previos al cambio es aconsejable:
– Acostarse a una hora prudente antes de la acostumbrada y levantarse 20 minutos más temprano.
– Será de gran ayuda el evitar consumir alcohol, alimentos pesados con mucha grasa o azúcar. Mientras más ligera sea la última comida mejor será la transición al descanso.
– En caso de que exista dificultad para dormir lo más viable es prescindir de las siestas durante esos días y el consumo de cafeína en exceso.
– Para que no haya distracciones por la noche bastará con no utilizar los smartphones y otros dispositivos electrónicos que impidan el descanso a tiempo.
A pesar de que el horario boreal implica una mañana mucho más oscura lo importante es descansar las horas establecidas. Foto Freepik.
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