Surfista escapa ileso tras toparse con enorme tiburón en Hawái

Para un surfista nunca es grato encontrarse con un tiburón mientras practica su deporte más amado. Muchos han sufrido terribles heridas y algunos no han podido siquiera contar la experiencia.

Tal parece que los tiburones andan últimamente de paseo (o de caza) por las playas de estados como Florida, Texas y Hawái. Cada día son más las historias de personas que tienen encuentros cercanos con estos animales y los surfistas son los que menos están protegidos ante esos sucesos.

Esto fue lo que le ocurrió a un joven deportista en días pasados, mientras practicaba en las costas de Oahu, Hawái. Nick Kapule se encontraba solo y de repente, notó a un inquietante compañero marino de 20 pies. En principio, pensó que esa sombra enorme correspondía a una ballena blanca.

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“Y siendo una persona curiosa, monté mi tabla hacia ella y dije: ‘Oh, esta es una ballena enorme’”, detalló a Fox News. Sin embargo, rápidamente su curiosidad se convirtió en un miedo terrible.

“¡No es una ballena, es un tiburón!”

“A medida que me acerco más y más, veo que una enorme aleta sale del agua, tenía una cola de 4 a 5 pies y era muy afilada”, relató el surfista. “Me dieron escalofríos y dije, ‘espera, ¡eso no es una ballena, es un tiburón!’”, continuó.

De inmediato se montó en la tabla de surf y comenzó a moverse con la mayor quietud posible para evitar llamar la atención del animal. La tabla de aluminio que cargaba era más delgada que las normales, por lo que estaba más propenso a caerse. “Por favor, no te caigas, no te caigas”, se decía a él mismo.

El joven pasó por un lado del tiburón y siguió de largo intentando hacer el menor alboroto posible. Unos minutos después, que se hicieron interminables, pudo sentirse a salvo ya más cerca de la orilla del mar.

Con increíble maniobra, Nick pudo documentar el momento pues llevaba consigo una cámara Go Pro. A través de sus redes sociales, compartió el aterrador encuentro con este tiburón.

Así fue como se enteró de que otras personas habían visto también al gran pez. De hecho, salvavidas de la playa le aclararon que no se trataba de un tiburón tigre como él llegó a pensar, sino de un tiburón blanco que suele frecuentar la zona. También le indicaron qué podía hacer en caso de un mayor acercamiento.

Le recomendaron que si se llegaba a sentir amenazado por uno de estos animales, podía golpearlo en la nariz. No obstante, reconocieron que en caso de un ataque real es poco lo que se puede hacer, por lo que recomiendan alejarse inmediatamente.