Citando “graves problemas estatutarios y constitucionales” con la norma, un tribunal federal de apelaciones de EE.UU. suspendió el sábado los esfuerzos del gobierno de Biden para exigir a los trabajadores de las empresas estadounidenses con al menos 100 empleados que se vacunen contra el COVID-19 o se sometan a pruebas semanales.
La sentencia del Tribunal de Apelación del Quinto Circuito de los Estados Unidos se produce después de que numerosos estados liderados por los republicanos presentaran recursos legales contra la nueva norma, que entrará en vigor el 4 de enero, reportó Wibw.
La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) dijo que el Departamento de Trabajo estaba “seguro de su autoridad legal” para emitir la norma.
La Procuradora del Trabajo, Seema Nanda indicó “la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo confiere explícitamente a la OSHA la autoridad para actuar rápidamente en caso de emergencia cuando la agencia considera que los trabajadores están sometidos a un grave peligro y que es necesaria una nueva norma para protegerlos”, dijo. “Estamos totalmente preparados para defender esta norma en los tribunales”.
La suspensión se produce dos días después de que el gobierno de Biden diera a conocer la norma, que fue inmediatamente recibida con promesas de acción legal por parte de los gobernadores republicanos y otros, que argumentaron que sobrepasaba la autoridad legal del gobierno.
La orden judicial del sábado se produjo en respuesta a una petición conjunta de varias empresas, grupos de defensa y los estados de Texas, Luisiana, Misisipi, Carolina del Sur y Utah.
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