A reconteo escaño demócrata al Senado por Florida

Cuando todo se creía dramáticamente resuelto a favor del republicano Rick Scott, la estrecha diferencia de votos, ha hecho que el escaño al Senado por Florida en manos del veterano senador demócrata Bill Nelson se someta a un reconteo de votos.

Por Redacción MiamiDiario

La jornada electoral del martes en Florida terminó a medianoche con un discurso de tono victorioso de Scott, un aliado del presidente Donald Trump, y la ausencia del demócrata Nelson.

Cuando el gobernador Rick Scott se declaró ganador en las elecciones por el escaño de Senador, con una ventaja mínima de 0.68 % del voto sobre su rival, el senador Bill Nelson, los números ponían en evidencia lo que se ha vuelto una característica en los procesos electorales de la Florida una votación muy pareja.

Pero lo que parecía un hecho para Scott y su campaña, dio un giro cuando su ventaja se redujo a menos del 0.5 en la madrugada del miércoles, lo que automáticamente abrió paso al reconteo de los votos.

Al filo de la medianoche hubo confusión. Scott se declaró su victorioso y la campaña de Nelson sugirió que el senador admitiría su derrota, pero no lo hizo, y cuando terminó el conteo, quedó claro que la victoria podría ser cuestionada.

A recontar

“Estamos procediendo a un recuento”, aseguró hoy en un comunicado el senador Nelson.

El último registro oficial de la División de Elecciones de Florida muestra una diferencia de 0,37 puntos a favor de Scott, gobernador saliente de Florida, que tiene el 50,18 % de los más de 8,1 millones de votantes escrutados frente a Nelson, con el 49,81 %.

“Se trata de una diferencia de unos 30.000 votos”,precisó Nelson. Según el comunicado, Scott había declarado “prematuramente la victoria después de que Fox News lo declarara el ganador.

Pero Nelson emitió una breve declaración poco después de eso, diciendo solo que los resultados hasta ese momento, con los votos aún por contar, fueron decepcionantes, y que esperaría hasta hoy antes de emitir una declaración completa”.

Los 67 supervisores electorales tendrán que verificar la cuenta total, y su campaña contactará a los votantes cuyas papeletas no fueron contadas, por ejemplo, debido a la falta de identificación o una dirección coincidente.

Agregó que “la fecha límite es el sábado al mediodía, o tal vez más en ciertas circunstancias, para determinar si el recuento procede de acuerdo con la ley”.

Por su parte Marc Elias, abogado de la campaña de Nelson dijo que espera que los supervisores, “independientemente de su afiliación partidaria, cumplan con sus obligaciones constitucionales”.

Scott no se preocupa

Pero en la campaña de Scott, no hay mucha preocupación por un recuento.

“Estas elecciones han terminado”, dijo Chris Hartline, portavoz de la campaña. “Es una manera triste para Bill Nelson de terminar su carrera. Él está tratando desesperadamente de aferrarse a algo que ya no existe “.

Un recuento de los votos tomará días, lo que extenderá más la tensión alrededor de las elecciones de medio término.

Medios locales, como el Tampa Bay Times y el Sun Sentinel, dieron a la medianoche a Scott como ganador.

El proceso

Los condados deben informar los primeros resultados no oficiales al estado a más tardar el mediodía del sábado, según establece la División de Elecciones.

En ese momento, si una elección está dentro del margen de recuento (0.5 por ciento), se ordenará un recuento de las boletas hecho por computadoras, cuyos resultados no oficiales no estarían antes del jueves 15 de noviembre.

Pero si el resultado del nuevo conteo es menor del 0.25 por ciento, se ordenaría un recuento manual que podría tomar mucho más tiempo.

Elecciones con mucho drama

Pero este no fue el único drama que se vivió el martes en Florida.

El candidato republicano Ron DeSantis le arrebató la gobernatura al demócrata Andrew Gillum también por un ‘pelo’ y en el último minuto, cuando se terminaba el conteo de condados con tendencia republicana. La diferencia entre ambos fue también de menos de un punto porcentual: 0.68 por ciento o un poco más de 55 mil votos.

En Florida también estaban también en juego los 27 puestos que le corresponden a Florida en la Cámara de Representantes de Washington, entre ellos el de la representante republicana Ileana Ros-Lehtinen, quien desde 2017 anunció que no iba a presentarse a la reelección.

Una demócrata reemplazará a la republicana Ros-Lehtinen, Donna Shalala, quien fue secretaria de Salud en la administración de Bill Clinton.

Entre tanto, otra demócrata, Debbie Mucarsel-Powell ganó el escaño del congresista cubano-estadounidense Carlos Curbelo, quien perdió por 4079 votos, menos de 2 puntos porcentuales. Es la primera vez que un candidato no cubano— Mucarsell-Powell nació en Ecuador— derrota a un rival cubanoamericano en Miami.

Otras elecciones locales también estuvieron tan apretadas que no se proclamó a un ganador.

En Doral, Digna Cabral, una investigadora del Departamento de Neurología de la Universidad de Miami, y la consultora de educación Belinda León, irán a segunda vuelta por un escaño como concejal.

Y un recuento manual es muy probable en las elecciones para Comisionado estatal de Agricultura y Servicios a los Consumidores pues el candidato republicano, y actual titular, Matt Caldwell, tiene hasta este miércoles una ventaja de 0.16 puntos porcentuales por encima de su rival, la abogada y cabildera Nicole Fried.

Nada de esto sorprende en Florida, el estado en el que cada voto cuenta y que le dio la victoria a un presidente, George W. Bush, por 537 votos.

Con información de Diario Las Américas y El Nuevo Herald