Alcohol y un posible embarazo: empeora caso de instructor de gimnasia en Key Biscayne

Un exinstructor de gimnasia se vio obligado a entregarse a las autoridades de Key Biscayne, luego de acusaciones en su contra por abuso y agresión sexual. Dos de sus víctimas denunciaron el comportamiento del que para entonces era su instructor en la disciplina y ahora el hombre está tras las rejas.

El acusado fue identificado como Oscar Olea de 38 años de edad y ambos casos de abuso sexual ocurrieron varios años atrás. De acuerdo con el informe de arresto fue cuando las chicas eran adolescentes y él estaba en sus 20.

Luego de quedar bajo custodia y en medio de la investigación previa a las respectivas audiencias, surgió nueva evidencia. Los detectives encontraron mensajes de texto alarmantes entre Olea y sus víctimas.

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Por estas denuncias el exentrenador quedó acusado con dos caros de participar en actos sexuales con un menor de edad y comportamiento inapropiado que involucra a niños y adolescentes.

Intercambio de mensajes con el instructor de gimnasia

El lunes 4 de marzo Olea se presentó ante el tribunal. Junto a su abogado presentaría los argumentos para su liberación en la audiencia de prisión preventiva. Sin embargo, el juez decidió posponer la sesión un día más para que los fiscales pudieran eliminar los nombres de las víctimas de las declaraciones.

Al tiempo que pasaba esto, surgieron una serie de mensajes de texto que habría enviado Olea a sus víctimas. Los mismos fueron obtenidos por el medio 7News y datan de los años 2011 y 2012.

En uno de los textos la adolescente le pidió al instructor que tuviera cuidado porque había tomado y consumido drogas, La respuesta del hombre fue completamente vulgar y fuera de lugar.

“Diablos, no. Envíame una foto del trasero desnudo mostrándome (improperio) y lo pensaré”, le dijo en ese entonces.

También la estuvo incitando para que bebieran alcohol juntos, a pesar de tener conocimiento sobre su edad.

¿Un posible embarazo?

En otras conversaciones, los investigadores encontraron que una de las víctimas del caso le expresó a Olea su preocupación al pensar que había quedado embarazada. Al leer esto, el instructor le respondió que si ese era el caso, la llevaría a una clínica de abortos.

“Si es que tienes un bebé, lo antes posible, faltas al colegio o al trabajo, tienes que hacerlo. Te llevaré”, escribió Olea.

La joven se limitó a decirle que no podía faltar a la escuela. Sin embargo, no han revelado en qué terminó esa conversación o si en efecto lograron confirmar el embarazo.

Por otra parte, había mensajes del acusado justificando su conducta al decir que mucha gente no se da cuenta de la relación que hay entre el entrenador y sus alumnas. El hombre siempre intentó ganarse la confianza de las niñas, haciendo que lo vieran como un hermano mayor o incluso un padre.

Las denuncias indicaron que los ataques ocurrieron en distintos lugares, entre ellos el viejo departamento del entrenador cerca de Crandon Boulevard. También abusó de ellas en su auto y en las instalaciones del gimnasio en Key Biscayne.