El lunes pasado, un caza A-10 Thunderbolt de la Fuerza Aérea protagonizó un incidente durante unas maniobras sobre Florida.
Por Redacción MiamiDiario
El A-10 Thunderbolt involucrado en el accidente pertenece al escuadrón 23d de la base aérea Moody, en Georgia. El caza de la Fuerza Aérea chocó contra un pájaro. Ni el piloto ni la aeronave sufrieron daños, pero el choque hizo que se soltaran tres bombas de entrenamiento.
Los tres proyectiles cayeron en algún lugar cerca de la autopista 129, en las inmediaciones de Suwannee Springs, al norte del Estado. No se han reportado daños, pero la Fuerza Aérea aún no ha podido localizarlas.
No son bombas reales…pero
Los artefactos no son bombas reales. Se trata de tres BDU-33s, un tipo de munición inerte de entrenamiento que pesa 11 kilos y se usa para simular las bombas M1a-82 de 226 kilos.
Las BDU-33s incorporan una carga pirotécnica que puede resultar peligrosa si alguien la manipula sin saber lo que hace.
Las colisiones contra pájaros no son extraordinarias para las Fuerzas Aéreas. Solo en Estados Unidos, la Fuerza Aérea del país tiene registros de más de 105.000 de estos accidentes desde 1995. El costo de estos incidentes asciende a más de 800 millones de dólares.
Los accidentes tampoco son siempre tan inocuos como en esta ocasión. Entre 1985 y 2016 fallecieron 36 pilotos como consecuencia de aviones chocando contra pájaros.
Con información de Gizmodo