Se sabe desde hace mucho tiempo que las aguas de Miami son un punto caliente para los tiburones, pero los científicos acaban de descubrir que también son un hábitat crítico para una especie icónica y en peligro de extinción: el gran tiburón martillo. Un nuevo estudio encontró que una pequeña sección de la Bahía de Biscayne o Biscayne Bay parece ser un “vivero” de tiburones martillo previamente desconocido, el primero de su tipo identificado en toda la costa atlántica estadounidense.
Catherine Macdonald, profesora de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas y Atmosféricas de la Universidad de Miami, dijo que no se había propuesto estudiar a los tiburones martillo. “Estábamos haciendo una investigación sobre otra especie en la Bahía de Biscayne”, explicó Macdonald, “y resultó que atrapamos un tiburón martillo juvenil. Luego otro. Y luego otro. Y después del tercero o cuarto nos dimos cuenta de que esto no es una coincidencia “.
Macdonald y su equipo cambiaron rápidamente su atención a los cachorros de tiburón martillo y esta semana publicaron sus hallazgos en la revista Conservation Science and Practice, informó la agencia AP.
El estudio se centró en un vivero de una milla cuadrada en el centro-norte de la Bahía de Biscayne, un área entre Key Biscayne y Matheson Hammock Park en el continente que es muy transitada por navegantes. Sugiere que proteger la Bahía de Biscayne puede ser fundamental para ayudar a una especie. en riesgo por la pérdida de hábitat y la presión de la pesca.
Una especie icónica
Los tiburones martillo, el tipo más grande de tiburón martillo, son uno de los carnívoros más familiares y feroces para nadar en la costa de Florida. Son depredadores ápice, lo que significa que nada los caza, mientras que ellos cazan lo que les place.
El bocadillo favorito de un tiburón martillo son las rayas, y a veces se las puede ver recorriendo las llanuras de hierba de la Bahía de Biscayne agitando sus cabezas en forma de T como detectores de metales para captar señales eléctricas de rayos enterrados antes de atacarlos. Los tiburones martillo a menudo también comen otros tiburones, como las puntas negras.
Los grandes tiburones martillo, que pueden vivir más de 30 años, tienen una infancia misteriosa, probablemente crecen en un hábitat que está a salvo de los depredadores y tiene una abundancia de alimentos, lo que los biólogos marinos llaman un vivero.
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