Exilda Arjona Palmer: Renunciar a algunas cosas, la clave para la felicidad

La mayoría de las veces la búsqueda de la felicidad nos ciega y nos lleva por caminos escabrosos, por la felicidad hacemos lo imposible, nos cegamos y la mayoría del tiempo creemos tener la razón.

Muchos estudios afirman que para llegar a un estado pleno de felicidad tenemos primero que renunciar, que dejar ir muchas cosas.

No será una ley de vida pero sí puedes tomar estos consejos y seguir en la búsqueda de eso que llaman felicidad.

• Lo primero es renunciar a que otros tomen las decisiones por ti.

En muchas ocasiones tenemos claro de lo que queremos pero escuchamos los consejos de quienes nos rodean y en muchos casos aceptamos al final a hacer lo que nos indican. Terminamos haciendo lo que ellos dicen y no la idea inicial que teníamos.

• Deja a un lado la venganza, los odios.

Te digo desde ya que es bien difícil ( lo sé de buena tinta) pero a veces hay que tomar actitud zen , meditar y aguantarnos los malos pensamientos porque a la corta o la  larga nos van a afectar y mucho.

• Aleja los pensamientos tóxicos.

Pensar solo lo malo, tener una conciencia negativa, donde nada es bueno y todo es gris con pespuntes negros no conduce a nada bueno. De qué te vale ir arrastrando  tus penas por ahí? De nada, así que aleja esos nubarrones de tu mente.

• Quita las barreras de tu camino

Cuando hablo de esto me refiero a lo que te impide cambiar, avanzar, muchas veces las ponemos nosotros mismos creyendo que no vamos a ser capaces de tener felicidad y cosas buenas en tu vida. Si son barreras externas, lucha y quítalas también para que puedas ver el camino.

• Aleja los prejuicios de tu vida

Vivimos en un mundo donde aún prevalecen muchos tabúes, prejuicios y qué dirán. Si vas a vivir pendiente a esto, nunca pero nunca serás feliz porque para criticar siempre aparecerá alguien.

• Olvídate de las imposiciones sociales.

Esto es básicamente de las normas sociales, a ver, no es vivir sin reglas sociales, es algo distinto, es dejar a un lado lo que esa sociedad espera de ti, que te cases a determinada edad, que tengas hijos, que tu relación de pareja sea normal, en fin, que no te salgas del redil.

• Pon el pasado en stop

De esto ya te he hablado en post anteriores, si somos esclavos del pasado no avanzaremos nunca.

Y por último y no menos importante, renuncia a no ser feliz porque si este es tu objetivo nada ni nadie te lo puede impedir, lucha por lo que quieras al precio que sea necesario.

“Simple como un vaso de chocolate o tortuoso como el corazón. Amargo. Dulce. Viva la felicidad.” Joanne Harris

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