Rodrigo García, hijo de Gabriel García Márquez, relata los últimos días del aclamado escritor en su nueva novela Gabo y Mercedes: Una despedida, que se publicó la semana pasada en España y Colombia.
García Márquez confesó en vida que lamentaba no poder escribir sobre su muerte, lo que inspiro a su hijo a contar las anécdotas de esa última etapa en la que Gabo, sumido en la demencia, ya no era Gabo.
“No escribí sobre su experiencia (con la muerte), eso lo estará escribiendo él ahorita en algún lugar. Pero me apoyé un poquito en esa idea para consolarme a mí mismo de escribir sobre su muerte sin que fuera de una manera demasiado indiscreta”, dijo en una rueda de prensa reseñada por El Nuevo Herald.
Rodrigo, el mayor de sus dos hijos, fue tomando notas durante esos últimos días con algo de culpabilidad y preocupado de no traicionar la vida privada de la familia.
“Allí de pie, me gustaría creer que su cerebro, a pesar de la demencia (y quizás con la ayuda de la morfina), es todavía el caldero de creatividad que siempre fue”, confiesa en las páginas.
García aborda a Gabo como una persona que en sus últimos momentos no era el padre que él reconocía, sino un extraño que apenas identificaba a nadie. También cuenta sobre la etapa anterior, en la que el escritor estaba consciente de que perdía facultades.
“Estoy perdiendo la memoria, pero por suerte se me olvida que la estoy perdiendo”, cuenta que les dijo en una ocasión el Nobel.
El libro es también la despedida a su madre, Mercedes, aseguró.
Gabriel García Márquez murió el 17 de abril de 2014, pero sus historias siguen siendo de actualidad y sus libros son un relato vivo para muchas generaciones.
#Gabo consideraba que la crónica y el reportaje pertenecían a una rama de la literatura que se ceñía estrictamente a los acontecimientos de la realidad.📜
Conoce 🔟reflexiones de García Márquez para entender la crónica.
Vía @centrogabo https://t.co/AnooanGWnR
— Fundación Gabo (@FundacionGabo) June 1, 2021
