Un investigador chino afirma haber modificado el ADN de unas gemelas nacidas este mes de noviembre, revela en un material exclusivo a la agencia Associated Press.
El científico, de nombre He Jiankui, asegura haber alterado embriones de varias parejas durante varios tratamientos de fertilidad. Con su procedimiento el hombre intentaba conseguir la capacidad de resistir a una futura infección con VIH, algo que pocos individuos tienen de forma natural.
Los padres de las gemelas prefirieron no ser identificados ni entrevistados Tampoco quisieron, según informa AP, que se revelara dónde viven ni donde se llevó a cabo el experimento. La ley china autoriza los trabajos de edición genética, pero prohíbe la clonación.
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He Jiankui dio a conocer su labor el lunes a uno de los organizadores de una conferencia internacional sobre edición genética que comenzará el martes en Hong Kong, y también reveló algunos datos en entrevistas exclusivas con AP. Pero no se han confirmado oficialmente las afirmaciones del investigador.
De ser cierta la información sobre el experimento, se trataría de un importante paso científico que acarrea profundas implicaciones éticas. La modificación del ADN puede pasar a las generaciones futuras y hay riesgo de que otros genes resulten dañados. Numerosos científicos tradicionales consideran peligrosa esta actividad, y algunos incluso denuncian que se trata de experimentación en seres humanos.
Según el profesor Kiran Musunuru, experto de edición genética de la Universidad de Pensilvania (EE.UU.), el trabajo es “inconcebible”. Es un “experimento con seres humanos que no es moral ni éticamente justificable”, afirmó.
“Es demasiado prematuro“, dijo el profesor Eric Topol, quien dirige el Instituto de Traducción [genética] Scripps (California, EE.UU). “Estamos tratando con las instrucciones de operación de un ser humano. Es algo muy importante”, destacó.
Sin embargo, He Jiankui defiende su trabajo. “Siento una fuerte responsabilidad y solo trato de dar un ejemplo. No se trata solo de hacer algo por primera vez”, aseguró el científico a AP. “La sociedad decidirá qué hará después” en relación con la posible prohibición o no de la edición genética en seres humanos, auguró.
