McDonald’s pagará indemnización millonaria a empleada abusada por un gerente

Una de las sucursales McDonald’s deberá desembolsar una gran cantidad de dinero por una demanda de agresión sexual que involucró a uno de los gerentes de la empresa. El sospechoso que tenía solo cuatro meses de haber sido contratado, estuvo involucrado en un hecho similar en el pasado.

El incidente ocurrió en 2021 en el restaurante ubicado en Bethel Park, Pensilvania. La víctima no identificada, tenía 14 años cuando Walter A. Garner de 44, la agredió en un baño del establecimiento.

De acuerdo con el informe de arresto, la niña quien también trabajaba en el local, empezó a sufrir acoso por parte de Garner. El hombre que cumplía labores como jefe, le hizo varias insinuaciones sexuales diciéndole que quería que ella fuera su “Happy Meal”.

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En febrero de ese año, el agresor siguió a la menor hasta el baño y la forzó. La denuncia de la víctima expuso que el hombre la tocó de forma inapropiada a pesar de que pidió que dejara de hacerlo.

Demanda contra sucursal McDonald’s

La afectada junto a otras dos personas que trabajaban en el local, propiedad de Rice Enterprises, le contaron al gerente de contratación lo sucedido.

Debido a la magnitud de los hechos, la compañía procedió con el despido de Garner y ofreció todo el apoyo a la víctima. Para ese entonces, la policía logró la captura del hombre y lo acusó de agresión sexual contra una menor.

Los fiscales del estado determinaron que cumpliera sentencia en una cárcel estatal. No obstante, el caso impulsó una demanda en contra del establecimiento en Pensilvania que más tarde motivó a una huelga de empleados.

Varias personas que trabajaban en las franquicias de 12 ciudades del país exigieron seguridad ante el continuo acoso y violencia que se vive en los restaurantes.

Acuerdo de pago

Por estos hechos, McDonald’s acordó pagar 4.4 millones de dólares a la víctima luego de que sus abogados culparan a la empresa por no hacer una verificación completa. La defensa alegó que Garner tenía antecedentes penales por un caso similar ocurrido en 2003 y el restaurante ignoró por completo ese punto.

Sin embargo, la cadena de comida rápida culpó a un proveedor externo por no hacer la verificación de antecedentes de forma correcta.

“Que una empresa permita que un delincuente sexual tenga acceso y control sobre adolescentes jóvenes convierte el primer trabajo en una pesadilla”, comentó uno de los abogados.

De acuerdo con un reporte de New York Post, Rice Enterprises dijo que desde lo ocurrido reforzaron los esfuerzos para garantizar una experiencia positiva y respetuosa para todos los empleados.

No obstante, actualmente enfrentan una segunda demanda similar por otro caso que también involucró a Garner con una adolescente en 2020. La víctima sostuvo que el sospechoso además de comportarse de manera hostil le mostró pornografía infantil.

Actualmente el caso está en curso y se encuentra presentado ante un tribunal federal de Pittsburgh.