La escuela para la que esta mujer trabajaba en calidad de maestra sustituta, sin duda nunca antes la había hecho enojar. El día de la fiesta de cumpleaños de una pequeña estudiante de la escuela Phillippi Shores Elementary, Heather Carpenter, de 42 años, estaba muy molesta por una queja . Tanto que se propuso sabotear el agasajo poner materia fecal humana en mesas y parrillas en un parque de Sarasota para vengarse de su Madre, la directora del colegio.
Por: Redacción Miami Diario
La policía informó que Carpenter estaba bastante enojada por una queja con la escuela en la que estaba trabajando. Las autoridades se enteraron del incidente el pasado primero de diciembre, cuando recibió una llamada alrededor de las 6:30 de la mañana en la que un testigo declaró haber visto a una mujer con guantes de goma y una máscara facial que colocaba materia fecal humana sobre siete mesas y dos parrillas en Urfer Park ubicado en Honore Avenue en Sarasota.
En su arrebato de furia descargado sobre una niña, esta mujer generó daños al condado de Sarasota por $ 2,310. Según se explicó, las mesas son porosas y tuvieron que ser reemplazadas a un costo de $ 1,400. Las parrillas, cada una de las cuales costó $ 650, fueron reemplazadas para garantizar la seguridad de los alimentos. La mano de obra para todo esto costó $ 150 y como el pabellón se alquiló por un día, el dinero se reembolsó a un costo de $ 110.
La policía comenzó su investigación hablando con la mujer que había reservado el pabellón para la fiesta de cumpleaños de una niña, programada para el mismo día en que ocurrió el incidente.
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Los detectives afirmaron que la directora de Phillippi Shores Elementary les dijo que había invitado a todos los niños de la clase de su hija a la fiesta de cumpleaños y que tenía una disputa en curso con una maestra sustituta, Heather Carpenter, El director explicó que Carpenter era un maestro sustituto y que el hijo de Carpenter estaba en la clase de su hija.
Aproximadamente una semana después, los detectives fueron a la residencia de Carpenter. La policía afirma que admitió haber puesto la materia fecal humana en las mesas y parrillas para interrumpir la fiesta de cumpleaños porque no estaba contenta con la forma en que se estaba manejando la queja. Carpenter fue arrestada y acusada de delito penal de tercer grado.
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