Informe del FBI: aumentó 17% crímenes de odio en EE UU durante el 2017

Según refieren los expertos, un crimen de odio es cualquier agresión contra una persona, un grupo de personas, o su propiedad, motivado por un prejuicio contra su raza, nacionalidad, etnicidad, orientación sexual, género, religión o discapacidad.

Por Redacción Miami Diario

Describen que los motivos fundamentales por los que estos crímenes se diferencian de los ordinarios es que en estos:

La víctima tiene un estatus simbólico, es decir, no se la ataca por quién es sino por lo que representa. Así, el afectado en ese momento, podría ser intercambiable por cualquier otra que comparta las mismas características.
La intención de este tipo de violencia no es solamente herir a la víctima, sino transmitir a toda su comunidad el mensaje de que no son bienvenidos;
En estos crímenes suelen participar múltiples agresores. En definitiva, los crímenes de odio tienen efectos negativos tanto en la víctima, como en la comunidad a la que ésta pertenece y en la sociedad en general.

Una de las preocupaciones del FBI en estos momentos es que los incidentes de crímenes de odio reportados al FBI en los Estados Unidos aumentaron aproximadamente 17% el año pasado en comparación con 2016 , según las estadísticas publicadas el martes por la Oficina Federal de Investigación.

Las estadísticas, que se publicaron en el informe anual ” Estadísticas de delitos de odio “ , compilan los incidentes generados por prejuicios que fueron presentados al FBI por 16,149 organismos de seguridad de toda la nación.

De acuerdo a lo que señala el documento, estos organismos denunciaron 7,175 delitos de odio en 2017, frente a los 6,121 incidentes reportados en 2016. Si bien el número aumentó, la cantidad de agencias que reportaron también creció en alrededor de 1,000.

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De los 7,106 delitos de odio de un solo sesgo reportados, el 59.6% de las víctimas fueron atacadas debido al sesgo de raza / origen étnico ; El 20,6% fue atacado por sesgo de orientación sexual; El 1,9% fue objetivo debido al sesgo de identidad de género; y el 0,6% fue objetivo por sesgo de género. Sesenta y nueve sesgos de odio por delitos de sesgo múltiple también fueron reportados.

En particular, de los 1,679 delitos de prejuicio religioso reportados en 2017, 58.1% eran antijudíos, mientras que 18.6% eran anti-musulmanes.

En una declaración publicada el martes, el fiscal general, Matthew Whitaker, sostuvo que el informe “es un llamado a la acción, y atenderemos esa llamada”.

“La principal prioridad del Departamento de Justicia es reducir los delitos violentos en Estados Unidos, y los delitos de odio son delitos violentos”, se lee en el comunicado.

“Estoy particularmente preocupado por el aumento de los delitos de odio antisemitas, que ya eran los delitos de odio religioso más comunes en los Estados Unidos, que está bien documentado en este informe. El pueblo estadounidense puede estar seguro de que este Departamento ya “tomamos acciones significativas y agresivas contra estos crímenes y que defenderemos vigorosamente y efectivamente sus derechos“, se lee en el comunicado firmado por Whitaker.

Algunas lecturas sobre el incremento de este tipo de delitos en el país, atribuyen al talante del presidente Donald Trump el aumento de la intolerancia racial en el país.