Médicos de Jerusalén practican cateterismo cardíaco en una bebé prematura de 860 gramos que nació en la semana 26 de embarazo.
Por Redacción MiamiDiario
“La cateterización fue un gran avance para nuestro equipo, que ahora nos permite tratar a pequeños bebés prematuros que sufren este problema en Israel y salvarlos de una cirugía”, dijo el director de la Unidad de Cateterización Pediátrica en Hadassah, Gur Mainzer, quien formó parte del equipo junto con los cardiólogos Sagui Gavri, Nurit Yaakobi y el neonatólogo Noa Ofek y la anestesióloga Shelly Stohl.
La cirugía se llevó a cabo en el Hospital Hadassah Ein Kerem, con la finalidad de cerrar un vaso sanguíneo central, lo que significa que el bebé nace con un orificio no sellado en la aorta.
Por tal motivo se sometió a la recién nacida a una inserción de tubos largos y delgados en los vasos sanguíneos desde la pierna para llegar al corazón y al conducto arterioso persistente, donde se inserta un tapón vascular a través de los catéteres.
“Los bebés pequeños tienen dificultades para recuperarse de la cirugía”, explicó Mainzer. Durante varios años el equipo de médicos se capacitó en distintos hospitales del mundo, con la finalidad de estar preparados ante un posible caso de un pequeño bebé prematuro con este defecto cardíaco.
Con información de Enlace Judio
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