Economista vaticina cuándo será la próxima recesión en Estados Unidos

La economía de Estados Unidos ha sido una de las más afectadas por diversos factores en los últimos años. Desde la guerra comercial con China, la pandemia o la guerra de Rusia con Ucrania, los índices de estabilidad no han vuelto a sus valores óptimos, ocasionando inflación y encarecimiento de la calidad de vida.

Frente a todo este panorama, varios expertos aseguran que en la actualidad estamos en una burbuja económica apunto de explotar. A pesar de que el 2023 se presenta como un año de recuperación, estos pronósticos apuntan a que la bonanza podría ser efímera.

Para algunos especialistas, el panorama económico de Estados Unidos podría tornarse gris en los próximos meses. Así lo advirtió David Rosenberg, presidente de la compañía de estrategia financiera, Rosenberg Research, quien vaticinó que para septiembre de 2023 los estadounidenses enfrentarían una recesión.

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Rosenberg, experimentado economista canadiense, alertó en el programa de economía, On The Main, sobre una potencial caída del 20% en el índice bursátil S&P 500 (que recoge a las 500 empresas más importantes del país) y un peligroso apretón del crédito para la fecha señalada.

The Incoming Recession Is a 2023 Story. Watch my full-length episode of @OnTheMarginPod with @MikeIppolito_ for @Blockworks_ as I walk through the leading indicators that suggest a slowdown could be on the very near horizon.

Watch here: https://t.co/mKRmtAlQae#RosenbergResearch

— David Rosenberg (@EconguyRosie) April 26, 2023

Según el experto, este escenario se gesta en parte por las agresivas alzas de tasas de interés decretadas por la Reserva Federal. “Fue como el conejito Energizer: nos dio un poco más de jugo. Pero decir que no vamos a tener una recesión debido a los impactos rezagados del estímulo fiscal de hace dos años es ridículo”, señaló.

Asimismo, reiteró que no será necesario esperar a 2024 para ver esta recesión en el mercado. Sin embargo, considera que el país tiene lo necesario para salir adelante. Además, afirmó que solo los más “fuertes” aprovecharán este periodo para hacerse de activos a un buen precio.

Sus advertencias se producen apenas unos días después de que la Oficina de Análisis Económico, informara que el crecimiento anualizado del PIB se desaceleró al 1.1%, muy por debajo de lo esperado.

¿Qué es una recesión y cómo se mide?

Una recesión se define como un período de declive generalizado de la actividad económica. Esta condición suele durar unos pocos meses y afecta al producto interno bruto (PIB), el empleo, los ingresos, las ventas y la producción industrial.

No existe una regla única para determinar cuándo se entra o se sale de una contracción. Uno de los indicadores más utilizados es el que establece que se produce cuando hay dos trimestres consecutivos de contracción del PIB real. Esta es la llamada “recesión técnica”, que no siempre coincide con la “recesión oficial”, que es declarada por un comité de expertos que analiza otros indicadores económicos.

En Estados Unidos, el encargado de declarar oficialmente el inicio y el final de las recesiones es el National Bureau of Economic Research (NBER), una organización privada sin fines de lucro que reúne a académicos e investigadores. Según el NBER, la última en Estados Unidos comenzó en febrero de 2020 y terminó en abril del mismo año, siendo la más corta de la historia del país.

¿Cómo prepararse para una recesión económica?

Puede un proceso complejo, aunque la mayoría de los expertos coinciden en los siguientes puntos:

Ahorra dinero: Si bien puede sonar obvio, es una de las mejores maneras de prepararse para una recesión. Trata de tener un fondo de emergencia que cubra al menos tres a seis meses de gastos básicos.

Reduce tus gastos: Evalúa tus gastos y busca áreas en las que puedas disminuir costos. Por ejemplo, puedes cancelar suscripciones innecesarias, comer en casa en lugar de afuera o buscar opciones más económicas para las compras.

Paga tus deudas: Trata de estar al día con todos los compromisos económicos lo antes posible puede evitar intereses y cargos adicionales.

Diversifica tus ingresos: Si es posible, considera tener diferentes fuentes para ganar dinero. Esto podría significar buscar un trabajo adicional, iniciar un negocio secundario o invertir en el mercado de valores.