Casi 200,000 niños en toda Florida podrían perder su acceso automático a almuerzos escolares gratuitos bajo una propuesta de la administración Trump que limitaría la cantidad de personas inscritas en el programa federal de cupones de alimentos, formalmente conocido como SNAP.
Por redacción MiamiDiario
La propuesta, anunciada por primera vez en julio por el Departamento de Agricultura de los EEUU, Restringiría la inscripción a SNAP al eliminar la capacidad de los estados de modificar algunos límites de ingresos y activos para los hogares que reciben cupones de alimentos y otros beneficios de bienestar, reportó TampaBayTimes.
En Florida, esa flexibilidad había permitido al Departamento de Niños y Familias del estado elevar el umbral para la calificación de SNAP, permitiendo que los hogares con ingresos de hasta el 200 por ciento del nivel de pobreza reciban cupones de alimentos, entre los más altos de la nación.
Según los criterios de elegibilidad más estrictos impuestos en la propuesta del Departamento de Agricultura, 328,000 floridanos y tres millones de personas en todo el país verían finalizados sus beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria.
Los niños estarían entre los más afectados porque la participación de SNAP también les otorga acceso automático a almuerzos escolares gratuitos, una disposición que forma parte del Programa Nacional de Almuerzos Escolares.
En Florida, el número de niños que estarían sujetos a perder sus cupones de alimentos y su elegibilidad automática para almuerzos gratis en la escuela es de 195,888, con algunos condados afectados más que otros.
Entre los lugares donde el cambio de política podría tener un alto costo es Miami-Dade, donde el 71 por ciento del alumnado está inscrito en el Programa Nacional de Almuerzos Escolares. Ese es el quinto porcentaje más alto en el estado, según el Instituto de Política de Florida.
A nivel local, el condado de Hernando tiene el mayor porcentaje de estudiantes matriculados con un 67 por ciento. (Hillsborough tiene 58 %; Pinellas 50 % y Pasco 55 %).
“Una vez que se retiren estos beneficios de SNAP, impactará drásticamente a los niños que acceden a almuerzos gratuitos en la escuela, y supondrá una carga mucho mayor para las familias que ya están luchando”, dijo Paco Vélez, presidente y CEO de Feeding South Florida, la organización de alivio del hambre más grande de la región.
“Los padres tendrán que aumentar su presupuesto para determinar cómo van a pagar la comida en casa, pero también tendrán que aumentar su presupuesto para pagar la comida de sus hijos en la escuela”.
En octubre, un nuevo análisis del gobierno de la propuesta del USDA mostró que casi un millón de estudiantes en todo el país ya no serían certificados directamente para comidas escolares gratuitas basadas en la participación de SNAP.
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