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Alec Baldwin no está de acuerdo con la versión del FBI

Hace unos días trascendió que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) aseguró que Alec Baldwin sí disparó el arma que asesinó a la directora de fotografía Halyna Hutchins en el set de la película “Rust”. A casi un año del incidente, las investigaciones forenses arrojaron que el arma que el actor tenía no se pudo […]

Por Allan Brito
Alec Baldwin no está de acuerdo con la versión del FBI
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Hace unos días trascendió que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) aseguró que Alec Baldwin sí disparó el arma que asesinó a la directora de fotografía Halyna Hutchins en el set de la película “Rust”.

A casi un año del incidente, las investigaciones forenses arrojaron que el arma que el actor tenía no se pudo disparar sin que se jalara el gatillo; sin embargo, el actor tiene otro veredicto.

 

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En entrevista con el periodista Chris Cuomo, para su podcast The Chris Cuomo Project, Baldwin reiteró que el arma defectuosa se disparó por sí sola y que “la única pregunta aquí es quién puso una bala real en el arma”.

Alec Baldwin contradice la hipótesis del FBI

​“La persona responsable de la seguridad durante el rodaje dijo que el arma era segura y que podíamos estar tranquilos cuando me la entregó… ¿Por qué dijo esto si no lo sabía o no lo había comprobado?”, agregó Baldwin, contradiciendo la hipótesis del FBI.

Aún se desconoce si la entrevista fue grabada antes del reporte del FBI, donde se concluye que el arma utilizada en el accidente no pudo haber sido disparada sin apretar el gatillo.

¿Cómo ocurrió la muerte?

En un minuto, el productor y estrella Alec Baldwin y un puñado de otros estaban ensayando una escena en una iglesia de madera en un polvoriento set del Viejo Oeste destinado a parecerse al Kansas de la década de 1880. Al minuto siguiente, dos personas estaban sangrando por heridas de bala —una de las cuales resultaría mortal— y todos se estaban recuperando de la confusión y la conmoción.

Un disparo repentino sonó en el set

El equipo estaba filmando el jueves pasado en el Rancho Bonanza Creek, una película del Viejo Oeste ambientada en las afueras de Santa Fe, Nuevo México. En la película, Baldwin interpreta a un forajido canoso que huye de las autoridades con su nieto de 13 años.

Por lo general, las mañanas comenzaban con el desayuno a las 6:30 a.m., pero ese día estaban retrasados. Un equipo de cámara de seis personas había abandonado recientemente el trabajo, quejándose del salario y la vivienda, y se había contratado un nuevo equipo.

Pero incluso con el retraso, las cosas parecían ir bien, dijo el director Joel Souza a los adjuntos del Sheriff del Condado de Santa Fe en la declaración jurada. Baldwin y los miembros del equipo comenzaron a ensayar una escena en la rústica iglesia, hicieron una pausa para almorzar y luego regresaron al set.

Baldwin, vestido con ropa del Viejo Oeste, estaba junto con Souza, la directora de fotografía Halyna Hutchins y algunos otros dentro de la sencilla estructura de madera. Se instaló una cámara, pero debido a que solo estaban ensayando, no se filmaba ni grababa nada.

El asistente de dirección Dave Halls sacó una pistola de utilería de un carro fuera de la iglesia y gritó “¡arma fría!”, lo que indica que estaba descargada. Luego se la entregó a Baldwin, quien estaba sentado en un banco de la iglesia frente a la cámara y al equipo.

Baldwin estaba ensayando un “tiro cruzado”, que es cuando un tirador saca el arma de una funda en el lado opuesto del cuerpo de la mano que desenfunda. La escena requería que apuntara con el arma hacia la cámara.

Eran alrededor de la 1:50 p.m. dijo Souza a los agentes cuando estaba viendo la escena a través de la cámara y los monitores cercanos cuando escuchó “lo que sonó como un latigazo y luego un fuerte estallido”.

Hutchins se tambaleó hacia atrás y cayó al suelo, agarrándose el estómago y diciendo que no podía sentir sus piernas. Souza, que estaba a su lado, notó sangre en su hombro.

De repente, hubo un caos.

Una supervisora de guiones llamó al 911

Los miembros de la tripulación se dispersaron. Un médico trató de detener la hemorragia de Hutchins mientras otros llamaban frenéticamente al 911.

En una llamada al 911, una mujer que se describió a sí misma como la supervisora ​​del guion de la película le contó al operador lo que había sucedido.

“Dos personas han recibido disparos accidentalmente en un set de filmación con una pistola de utilería. Necesitamos ayuda de inmediato”, dijo la mujer, según una transcripción de la llamada obtenida por KOAT, afiliada de CNN.

“Han disparado a un director y a una camarógrafa”.

El operador del 911 preguntó si la pistola de utilería estaba cargada con una bala real. Fuente: Mundo Deportivo.

 

 

 

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