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DeSantis busca calmar preocupación por aumento de casos

El brote de coronavirus sigue su paso arrollador en Florida, ayer el gobernador Ron DeSantis nuevamente busca en cada discurso, calmar la preocupación por otro aumento récord de infecciones desde la reapertura de restaurantes, bares, gimnasios y otros lugares públicos. Por redacción MiamiDiario El estado reportó más de 4 mil nuevos casos de COVID-19, el […]

Por Allan Brito
DeSantis busca calmar preocupación por aumento de casos
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El brote de coronavirus sigue su paso arrollador en Florida, ayer el gobernador Ron DeSantis nuevamente busca en cada discurso, calmar la preocupación por otro aumento récord de infecciones desde la reapertura de restaurantes, bares, gimnasios y otros lugares públicos.

Por redacción MiamiDiario

El estado reportó más de 4 mil nuevos casos de COVID-19, el total diario más alto hasta ahora en un estado que ahora ha visto un resurgimiento constante desde su reapertura. El Departamento de Salud de Florida también informó que 40 personas más han muerto por el virus, lo que lleva el recuento del estado a más de 3,140.

Durante una conferencia de prensa en la tarde en el Capitolio de Florida, DeSantis trató de desviar la atención de la gran cantidad de casos nuevos que han comenzado a generar alarma.

Creo que también es importante proporcionar contexto y perspectiva en términos de lo que eso realmente significa“, dijo el gobernador a los periodistas.

Con más personas siendo evaluadas, DeSantis dijo que el número de casos seguramente aumentará. Dijo que hubo un salto notable en el número de personas jóvenes asintomáticas de entre 20 y 30 años que dieron positivo.

El gobernador busca decir que la complacencia podría ser un factor ya que los floridanos no prestan atención a las medidas de distanciamiento social cuando comienzan a reanudar sus vidas cotidianas.

“Ahora llevamos tres meses en esto. Hay mucha fatiga en términos de distanciamiento social ”, dijo.

Los jóvenes en particular han estado entre los delincuentes más persistentes, sugirió DeSantis. A lo largo de las semanas, la edad promedio de las personas con resultados positivos ha disminuido.

El gobernador rechazó los llamados a hacer que las máscaras sean obligatorias en lugares como supermercados y otros lugares públicos, y dijo que busca dejar que las localidades decidan imponer medidas más estrictas. En cambio, ordenó al cirujano general del estado que volviera a emitir un aviso de salud pública que simplemente recomienda que los floridanos usen máscaras para ayudar a evitar que el virus se propague y abstenerse de asistir a reuniones de más de 50 personas.

La representante estadounidense Lois Frankel, demócrata del sur de la Florida, pidió a los funcionarios locales que requieran de inmediato que se usen máscaras en los supermercados y otros establecimientos minoristas.

“Con el aumento de COVID-19 a un ritmo alarmante, todos deben hacer su parte para detener su transmisión”, dijo.

Desde que comenzó el brote a principios de este año, casi 94,000 floridanos han dado positivo por el virus. El estado dijo que los resultados de las nuevas pruebas se informaron el viernes para 34,400 personas y mostraron una tasa de infección de más del 12%, una clara indicación de la propagación pública de la enfermedad. Busca decir que la tasa se ha triplicado desde alrededor del 4% hace una semana.

El nuevo registro diario de infecciones llega solo un día después de que se estableció el registro anterior, cuando el estado anunció más de 3,800 casos confirmados adicionales.

El estado ha permitido la reapertura de bares, restaurantes y algunos parques temáticos, y desde entonces los casos se han disparado.

Con el aumento de las infecciones, las hospitalizaciones también han aumentado, pero a un ritmo mucho más lento, dijeron funcionarios de salud estatales. Pero no hay escasez de camas para quienes necesitan tratamiento.

Si bien el gobernador se ha resistido a los llamados a retirarse de su esfuerzo por reabrir la economía del estado, algunas de las ciudades más grandes de Florida han retrasado sus planes de reapertura.

Con la economía de Florida gravemente dañada por el brote, y su tasa de desempleo del 14.5% en mayo, DeSantis ha estado bajo presión para que su estado vuelva a funcionar.

Con información de NBC Miami

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