Pastora de Florida dejó a su bebé olvidada mientras predicaba, murió de calor

Una pastora cristiana enfrenta cargos de homicidio, por la muerte de su hija de 11 meses a la que dejó olvidada en su vehículo. Ese día la líder religiosa iba tarde al servicio y en ningún momento se preocupó en saber en dónde estaba su primogénita.

La víctima de toda esta historia es Fendra Molme, quien estaba próxima a cumplir su primer año de vida. Su madre, Bulaine Molme, aseguró que pensaba que alguna persona de la iglesia la había sacado del auto y llevado hacia las instalaciones del recinto religioso. Justamente ese día hacía una temperatura de 81 grados.

La mujer es cofundadora y pastora principal de la iglesia Bautista Evangélica Mount of Olives en Palm Bay. Durante su declaración al detective del Sheriff del Condado de Brevard, indicó que al llegar la acompañaban sus otros tres hijos, ninguno mayor de 8 años.

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Mientras tanto la bebé estaba dormida, por lo que no emitía ningún ruido. Como iban tarde sus tres hijos mayores ingresaron al templo y ella se dirigió al maletero a buscar su Biblia y computadora portátil. En ningún momento volvió a registrar el vehículo para cerciorarse que nadie estuviera adentro.

Los investigadores descubrieron que era costumbre de la pastora dejar el cuidado de sus hijos a miembros de la iglesia. A menudo, alguien buscaba a la bebé  en el auto y la ayudaba con su supervisión. Sin embargo, ese día cambió todo, porque tuvo que estacionarse en un lugar más alejado al templo, por lo que, nadie se percató de su arribo.

En ningún momento durante el servicio de tres horas, Molme vio a su hija en la iglesia, pero le dijo a los detectives que pensaba que la niña “solo estaba durmiendo”, según los informes.

Lo peor del caso, es que en el servicio religioso también estaba su esposo, tocando el piano. Él tampoco sospechó nada e incluso confundió a su hija con otro bebé presente entre los feligreses.

Finalmente, el servicio terminó a la 1 de la tarde y todos comenzaron a conversar, como era costumbre. Entre la palabrería alguien le preguntó a la pastora por su bebé, que no había estado en el sermón. Solo en ese momento, la Pastora Molme se dio cuenta que su primogénita no estaba.

Al poco tiempo corrió hacía su camioneta y encontró el peor escenario posible. Fendra estaba sin responder e inerte en el asiento del pasajero trasero. Cuando la angustiada madre sacó al bebé del asiento del auto, “su cabeza cayó hacia atrás”.

En ese instante, con su hija en brazos, corrió hasta la iglesia y llamó a los servicios de emergencia. Mientras tanto, el padre de la niña comenzó a realizarle reanimación cardiopulmonar. A los pocos minutos, trasladaron a la bebé al Palm Bay Community Hospital, donde murió.

Según la declaración jurada de arresto, la temperatura corporal del bebé era de 108 grados. Más tarde, un forense dictaminó que murió de hipertermia causada por sobrecalentamiento.

Por sus actos la madre enfrenta cargos por homicidio agravado de un menor. La acusada quedó en libertad bajo fianza después de $15,000. Ahora, espera la lectura de sus cargos, programada para el 27 de junio, donde probablemente reciba una pena.