Miami

Más de 50 niños infectados con bacteria al recibir vacunas en Kendall Drive

Las familias demandan a la doctora Esther Marin-Casariego y la empresa que facilitó las agujas.

Por Fiorella Tagliafico
Más de 50 niños infectados con bacteria al recibir vacunas en Kendall Drive
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Para los niños, la experiencia de recibir sus vacunas suele ser atemorizante. Si a esto le sumas, que con una inyección su vida se transforma en una pesadilla, el trauma que les quedará puede no ser reparable. 

Los pediatras deben ser altamente calificados, además deben tener más cuidado al manipular objetos que vayan a tener contacto con los pequeños, ya que son más vulnerables. 

Si esto no ocurre, se desencadenan situaciones lamentables como las que viven al menos 50 familias en el sur de Florida. Específicamente, en un consultorio médico en Kendall Drive, del condado de Miami-Dade, decenas de niños recibieron sus vacunas y a los pocos días comenzaron síntomas que preveían que algo estuvo mal en el procedimiento.

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Los padres de los pacientes, que comenzaron a tener una reacción a las vacunas recibidas, están demandando a la doctora y a la empresa fabricante de las agujas con las que inyectaron a sus hijos en el año 2021. 

¿Cómo sucedieron los hechos?

Los pacientes acudieron al consultorio de la doctora Esther Marin-Casariego, ubicado en 8740 N de Kendall Drive, durante el verano de hace 2 años. Todos tenían edades comprendidas entre un mes de nacido y 18 años de edad. 

En cuestión de días, presentaron pus, enrojecimiento y dolor en la zona donde recibieron la vacuna. Luego de realizarles varias pruebas, confirmaron que estaban infectados con Mycobacterium abscessus, una peligrosa bacteria que puede causar abscesos.

Esta suele encontrarse en el suelo, polvo y agua. Suele causar infecciones de la piel a través de inyecciones de agujas contaminadas, además es resistente a los antibióticos y requiere cirugía para eliminarse. 

Los pequeños tuvieron que pasar por el quirófano y quedaron con una gran cicatriz en su cuerpo, debido a la infección que sufrían. 

Al correrse el rumor de que varias familias pasaban la misma situación y que el denominador común era la visita a la misma pediatra, se unieron para entablar una demanda en contra de la doctora y de la empresa distribuidora de agujas McKesson, en el Tribunal de Circuito de Miami-Dade.

Los pequeños presentaron los síntomas de la infección tras recibir la vacuna. Foto: Law Firm Goldberg and Rosen

Demandas cruzadas

La firma de abogados Goldberg y Rosen de Miami lleva varios casos de estas familias perjudicadas y espera lograr no solo un resarcimiento moral sino también descubrir el verdadero responsable de este lamentable desenlace. 

“Creemos que los denominadores comunes son las agujas”, argumentaron los abogados de al menos 13 padres, Brett y Judd Rosen. Explicaron que las vacunas fueron descartadas como causa porque los niños recibieron marcas y formulaciones diferentes. 

Tras la querella, McKesson culpó a la doctora y viceversa. Ninguno se hace responsable por las infecciones adquiridas por los niños. 

“La Dra. Marín-Casariego admitió ante los padres afectados y sus familias que la infección bacteriana es el resultado de agujas y/o jeringuillas incorrectamente esterilizadas o contaminadas que fueron distribuidas por McKesson”, indica la demanda. 

Las cicatrices en los pequeños quedarán para siempre. Foto: NBC6

Así mismo, la pediatra presentó una “demanda cruzada” contra la compañía, afirmando que es la culpable porque le distribuyó agujas contaminadas. 

Ahora, están en la espera del juicio con jurado que comenzará en el año 2024 en el Tribunal de Circuito de Miami-Dade. 

Testimonios de las familias de Miami

Ailyn y Arnold Cuervo son los padres de una niña de 3 años que tuvo que ser operada en 2021. Esto debido al absceso que le salió tras recibir la vacuna. Ailyn, quien es empleada del medio NBC6, señaló que la terrible experiencia fue desgarradora para la familia.

Dos años después de que su hija fuera infectada, Ailyn dice que su hija ahora tiene fobia a las agujas. Ellos, como padres, también quedaron con miedo.

La familia Cuervo espera que sean juzgados los responsables. Foto: Law Firm Goldberg and Rosen

“Siento que ahora, cada vez que se enferma con algo, siempre vamos al médico. Le preguntamos si podría ser esto un efecto a largo plazo de algo que causó la aguja”, dijo Cuervo.

Esa es una de las razones por las que quieren que alguien rinda cuentas sobre lo que ocurrió.

“Un bebé no puede pasar por una cirugía y que nadie asuma la culpa. Todos se señalan con el dedo. No es justo. No es justicia”, agregó la desesperada madre. 

Por su parte, Kimberly Cook, abogada de la pediatra Marin-Casariego, explicó al referido medio que su clienta niega toda responsabilidad por las infecciones. 

“Tan pronto como notó una reacción por primera vez, comenzó a investigar. Determinó que el único factor común eran las agujas que usó”, acotó la abogada.

Sin embargo, el abogado de McKesson señaló que la culpa es de las bacterias en el agua de la oficina de Casariego. En su defensa, indicó que con millones de agujas distribuidas, “ningún otro comprador de agujas informó de un brote de infecciones”.

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