Este viernes, el capitán de un barco de buceo se declaró inocente ante un tribunal federal del homicidio involuntario de 34 personas que quedaron atrapadas bajo cubierta durante un incendio que ocurrió hace tres años frente al sur de California.
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El mes pasado, un gran jurado federal emitió una nueva acusación, alegando que el capitán Jerry Boylan actuó con negligencia a bordo del Conception.
Se trata de uno de los desastres marítimos más mortíferos en la historia reciente de Estados Unidos. Un juez había desestimado el caso original contra Boylan en el tercer aniversario de la tragedia del 2 de septiembre de 2019, reseñó Local 10.
Muerte de 33 pasajeros
Este jueves, Boylan hizo una breve aparición en el Tribunal Federal de Distrito de Los Ángeles y su juicio estaba programado para el 20 de diciembre.
El hombre se enfrenta a 10 años de prisión si es declarado culpable de un solo cargo de mala conducta o negligencia de un oficial de barco. Se trata de un estatuto anterior a la Guerra Civil conocido como “homicidio de marinero” que fue diseñado para responsabilizar a los capitanes y la tripulación de los barcos de vapor por desastres marítimos.
Los 33 pasajeros y un miembro de la tripulación que quedaron atrapados en la sala de literas del Conception murieron.
Asimismo, Boylan al ver la situación en la que se encontraba pidió ayuda por radio, luego de que él y cuatro miembros de la tripulación que dormían sobre la cubierta se despertaron con el fueg. Fue el primer hombre que cayó por la borda; luego le dijo a su tripulación que abandonara el barco en lugar de combatir el fuego, según la acusación.
Se le acusa de no capacitar a su tripulación, realizar simulacros de incendio y no colocar un vigilante nocturno itinerante en el barco.
Los fiscales presentaron el segundo caso contra Boylan después de que el juez federal de distrito George Wu desestimara en septiembre la acusación original, porque no mencionaba negligencia grave, un elemento necesario para probar el delito.
La acusación posterior alega que Boylan “actuó con un desprecio desenfrenado e imprudente por la vida humana al participar en mala conducta, negligencia grave y falta de atención a sus deberes”.
Truth Aquatics Inc
Las autoridades culparon a los propietarios de la embarcación Truth Aquatics Inc. por la falta de supervisión a pesar de que los investigadores federales de seguridad nunca encontraron la causa del incendio. Los propietarios, Glen y Dana Fritzler no han sido acusados penalmente.
Truth Aquatics busca evitar pagos a las familias de las víctimas en virtud de una disposición de la ley marítima federal. Los familiares de los fallecidos han presentado demandas contra los Fritzler y la empresa, y han demandado a la Guardia Costera de EE. UU.
Los familiares de los que perecieron en el mar se presentaron para la lectura de cargos de Boylan y dijeron que han sido tres años difíciles en busca de justicia.
“Ha sido un viaje largo, un viaje muy duro. Y aprender a vivir con el duelo es muy difícil”, dijo Susana Solano Rosas, quien perdió a tres hijas en el incendio. “Hoy significa que, con suerte, podemos ver un poco de justicia… La corte avanzará y juzgará a este hombre, juzgará a este capitán que permitió que 44 personas fueran asesinadas y quemadas en ese barco”.
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