Vida saludable

Estudio revela el grave daño que ocasiona la obesidad al cerebro

Las personas con obesidad pueden sufrir diferentes alteraciones en sus cerebros.

Por Angel David Quintero
Estudio revela el grave daño que ocasiona la obesidad al cerebro
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La obesidad es una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo y que tiene graves consecuencias para la salud física y mental. Aunque pareciera que ya todo está descubierto, con el pasar del tiempo los científicos entienden mejor los efectos que tiene en el organismo.

A menudo, las personas obesas se sienten incomprendidas por la sociedad. Todos conocen la fórmula para bajar de peso, pero por alguna razón algunas personas no pueden apegarse a una dieta saludable. Resulta, que al parecer no siempre se trata de fuerza de voluntad y pudieran estar implicados otros procesos.

Un estudio reveló que la obesidad no solo afecta al corazón y otros órganos sino también al cerebro. La enfermedad influye en su capacidad para detectar la sensación de saciedad después de comer alimentos ricos en grasas y azúcares.

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Además, los efectos no solo están presentes en personas obesas. ¿Alguna vez has notado que los individuos con sobrepeso que adelgazan son propensos a volver a subir de peso? La respuesta a ese fenómeno también pudiera estar en este estudio. Sus cerebros pueden conservar la afección de falta de saciedad, sin importar cuánto estén dando en la báscula.

Las personas que han adelgazado son propensas a volver a subir de peso

La doctora Caroline Apovian, profesora de medicina en la Escuela de Medicina de Harvard y codirectora del Centro para el Control y Bienestar del Peso del Hospital Brigham and Women’s de Boston, señaló que “las personas con obesidad tienen cerebros que siguen careciendo de las respuestas químicas que le dicen al cuerpo: ‘Está bien, comiste lo suficiente'”.

El estudio, publicado en Nature Metabolism, permitirá a los expertos, abordar mejor estos casos.

La doctora Mireille Serlie de la Universidad de Yale, autora principal del estudio explicó que cuando una persona saludable come, el cerebro reconoce que han alimentado el cuerpo. Seguidamente, el órgano activa los centros de recompensa y las personas sienten saciedad. Por otra parte, las personas obesas o que en algún momento lo fueron, experimentan señales de recompensas más leves o directamente sus cerebros no reconocen cuándo son alimentados.

Un análisis de varios ensayos clínicos de pérdida de peso a largo plazo realizados en 2018, reveló que el 50 % de la cantidad de peso que una persona había perdido en un principio, volvía a recuperarse después de dos años; y para el quinto año, se recuperaba alrededor del 80 % del peso perdido.

Los especialistas están evaluando cómo pueden aplicar estos nuevos conocimientos en pacientes que comen demasiado

La investigación sigue

Aunque las conclusiones ofrecieron resultados prometedores, lo cierto es que los científicos quedaron con más preguntas que respuestas. Ahora, centrarán sus esfuerzos en descubrir en que lapso de tiempo las señales del cerebro de una persona obesa empiezan a fallar.

Por otro lado, descubrieron que después de tres meses de haber adelgazado, el cerebro no recupera su capacidad. Por ende, otro de los objetivos es indagar si en un periodo más largo de tiempo, una persona que adelgazó vuelve a recuperar su capacidad de recompensa cerebral al comer.

“¿Hay cambios que ocurrieron en las personas a medida que aumentaban de peso? ¿O hay cosas que estaban comiendo a medida que aumentaban de peso, como los alimentos ultraprocesados, que causaron un cambio en el cerebro? Todos estos son posibles, y realmente no sabemos cuál es”, dijo sobre este estudio, Sadaf Farooqi, profesor de metabolismo y medicina en la Universidad de Cambridge en el Reino Unido.

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