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Carlos A Garcia Perez: ¿Por qué nuestros líderes no atienden el tema de la deuda?

 Porque la última cuenta no la paga el Diablo la pagarán tus hijos, por lo tanto, el problema no es El Muro…¡Es la Deuda! Por Carlos A Garcia Perez Impacta a todos La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) proyecta que el interés por la deuda nacional llegará a $ 383 mil millones este año, […]

Por Allan Brito
Carlos A Garcia Perez: ¿Por qué nuestros líderes no atienden el tema de la deuda?
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 Porque la última cuenta no la paga el Diablo la pagarán tus hijos, por lo tanto, el problema no es El Muro…¡Es la Deuda!

Por Carlos A Garcia Perez

Impacta a todos

La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) proyecta que el interés por la deuda nacional llegará a $ 383 mil millones este año, un aumento del 18% respecto al año pasado. Para el 2029, los Estados Unidos tendrán que pagar $ 928 mil millones solamente en intereses.

A medida que se canaliza más dinero hacia el pago de los intereses de la deuda nacional, el gasto federal se reduce, lo que significa menos dinero para infraestructura, educación, investigación y desarrollo. Mientras más dinero tengamos que usar para el pago de intereses, menos nos queda para invertir en el futuro de nuestros hijos y nietos, como en educación y  servicios de salud. O sea, nuestras contribuciones tendrán menos valor ya que la mayoría de los aportes irán al pago de intereses, no a reducir el principal de la deuda.  Si esto continua nos podemos ir despidiendo de una buena educación pública, sin hablar de nuestro ya sobrecargado sistema de servicios de salud.

La CBO estima que, con las proyecciones actuales, la deuda nacional reducirá los ingresos de una familia en $ 16,000 para 2048.

Crisis en la educación

Un informe de este mes del Centro de Presupuesto y Prioridades de Políticas encontró que 34 estados están aportando menos fondos por estudiante que antes de los años de la recesión. Dado que los estados son responsables del 44 por ciento del financiamiento total de la educación en los Estados Unidos, estos números ponen en evidencia la continua contracción de los presupuestos escolares a pesar del mejor desempeño de la economía.

Los recortes fiscales han disminuido los ingresos públicos de tal manera que Gobiernos, como el de Oklahoma, por citar un ejemplo, se han quedado sin recursos. Esto se ve en la reducción del presupuesto educativo (un 28% desde 2008).

Lo que explica que miles de profesores de escuelas públicas de Virginia Occidental, Kentucky, Oklahoma, Arizona y Colorado salieran a la calle para exigir mejoras salariales y más presupuesto educativo.

Aunque algunos estados, como Nueva York, otorgan mejores condiciones a sus docentes, el profesor medio de secundaria en EEUU gana un 60% del sueldo que percibe alguien de su mismo nivel educativo, muy por debajo del 102% que ganan los profesores franceses o el 94% de los alemanes.

El horario del docente americano también es más largo: pasa 981 horas al año en clase, casi un 40% más que la media registrada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

A lo que hay que agregar que de acuerdo a un informe de la mencionada organización el sistema escolar de Estados Unidos es uno de los menos igualitarios del mundo industrializado. Las posibilidades de acceso a educación de calidad de los alumnos varían en función del estatus social de sus familias. Entre las 146 mejores universidades de EE.UU, apenas un 10% de los alumnos es de clase media baja.

Un informe, publicado por la universidad del Temple y el centro Wisconsin HOPE Lab, encontró que más de un tercio de los alumnos en universidades estadounidenses no tiene suficiente dinero para comer adecuadamente.

Los investigadores analizaron respuestas de 43.000 estudiantes de 66 centros de estudio superiores en 20 estados y el distrito de Columbia, y concluyeron que el 36% de ellos ni comían lo suficiente ni tenían acceso a una vivienda segura.

El costo promedio de la matrícula en un centro público es de 14.210 dólares si el estudiante se queda en su mismo estado. Esa cifra se eleva a 20.090 dólares cuando se incluye el gasto de dormitorio.

Hay más de 44 millones de estadounidenses que arrastran algún tipo de deuda desde los estudios. El volumen total crece a un ritmo de vértigo. Hace diez años rondaba los 640.000 millones.

La deuda media de un graduado asciende en promedio a los 28.400, según el The College Board. La cifra es mayor para los estudiantes que van a universidades privadas.

El problema de la deuda en los egresados universitarios es una modalidad nueva de esclavitud financiera. Cuando se gradúan tienen que estar trabajando para pagar, postergando, por ejemplo, el ahorro o la compra de vivienda.

Y…Por supuesto ¡La Salud!

Finalmente, pero no menos importante es que una crisis que se avecina es la de la salud. Los costos continúan subiendo y no hay una propuesta de solución a la vista.

Según un estudio financiado por Covered California las tarifas de los seguros de salud en EEUU subirán del 12 al 30% para 2019 y del 35 al 90% para 2021 debido a las condiciones actuales de incertidumbre de la Ley de Salud Asequible (ACA), conocida como “Obamacare”.

Estados como Alabama, Arizona, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Delaware, Luisiana, Michigan, Misuri, New Hampshire, Nueva Jersey, Ohio, Oklahoma, Pensilvania, Tennessee, Texas, Virginia del Oeste y Wisconsin, verán incrementar sus seguros en un 90%.

Lo que explica que cada vez más las personas acudan a recursos como GoFundMe, o similares para cubrir los tratamientos.

Un estudio de NerdWallet sobre la financiación colectiva para atención médica dijo que GoFundMe había indicado que 930 millones de los 2,000 millones de dólares captados en el período analizado por el estudio, correspondían a campañas médicas.

Esto sin contar el incremento en los precios de los medicamentos. Como son pocas las regulaciones existentes para proteger a los pacientes, un medicamento que en Canadá o México cuesta unos 30 dólares puede costar 750 en EE. UU.

Los expertos concuerdan en que mientras la opinión pública se distrae con el tema del Muro, Washington está incubando problemas que tarde o temprano tendrán consecuencias. Marc Goldwein, vicepresidente del Comité por un Presupuesto Federal Responsable, un centro de investigación de Washington, lanza una advertencia. “Las tasas de interés están bajas. Pero la deuda está a niveles récord. Y no hay planes de reducirla. Eso es insostenible”.

Por lo tanto, la última deuda no la paga el Diablo, la pagan tus hijos.

Carlos A Garcia-Perez es un abogado experimentado que ha representado a compañías de Fortune 500 en las Américas. Durante la administración de Barack Obama fue director de Radio y TV Martí.

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