Vida saludable

Dormir con la ventana abierta: el secreto para un sueño profundo y reparador

Una habitación mejor ventilada puede ayudar a dormir profundamente y sin interrupciones.

Por Luisana Valdivieso
Dormir con la ventana abierta: el secreto para un sueño profundo y reparador
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Todos hemos experimentado esas noches en las que el sueño parece esquivo y nos revolvemos una y otra vez en la cama sin poder conciliar el descanso. Si bien existen muchas estrategias para mejorar la calidad del sueño, una de las más simples y efectivas es dormir con la ventana abierta.

Para algunos es impensable, bien sea porque viven en una zona donde hace mucho frío, o por el contrario, el calor les agobia. Los insectos, la humedaad y otros factores también pueden hacer inviable mantener las ventanas abiertas. Lo cierto es que más allá de un tema de temperatura, es la ventilación de nuestra habitación lo que ayuda a descansar mejor.

Deshacerse del dióxido de carbono (CO2) es una ventaja, ya que su alta concentración en el área de descanso, puede perturbar el sueño. Así lo determinó un estudio realizado por investigadores holandeses de la Universidad de Tecnología de Eindhoven, publicado en Indoor Air.

Leer más: ¿Cuál es la forma más saludable de beber licor?

“Unos niveles bajos de CO2 implican una mejor profundidad y eficacia del sueño y menos posibilidades de despertarse durante la noche”, afirma el estudio.

A pesar de esto, todavía hay quienes son escépticos ante esta práctica, por lo que queremos explorar algunas razones personales y otras científicas para tomar la decisión de abrir la ventana o no. Después de todo, no está mal evaluar tus opciones si se trata de transformar tus noches en un oasis de descanso reparador.

Las ventanas abiertas permiten una mejor circulación del aire en la habitación. Foto: Freepik

Razones personales para dejar la ventana abierta

– Aire fresco y renovado: Abrir la ventana permite que entre aire fresco y renovado en tu habitación. Esto es especialmente beneficioso si vives en una zona con aire limpio y natural. Respirar aire fresco puede hacerte sentir más relajado y tranquilo, lo que facilita el sueño.

– Sonido relajante: El sonido de la naturaleza, como el canto de los pájaros o el susurro del viento, puede tener un efecto tranquilizador. Estos sonidos pueden enmascarar ruidos molestos de la ciudad o vecinos, ayudándote a conciliar el sueño más rápido y mantenerlo durante toda la noche.

Conexión con la naturaleza: La sensación de estar conectado con el entorno natural puede tener un impacto positivo en tu bienestar general. Dormir con la ventana abierta te permite experimentar la brisa y los olores de la noche, lo que puede aumentar tu sensación de paz y serenidad.

Estado de mayor conexión con el ambiente exterior. Foto: Freepik

¿Qué dice la ciencia?

Regulación de la temperatura: Mantener la temperatura de la habitación adecuada es esencial para un sueño reparador. Dormir con la ventana abierta puede ayudar a mantener un ambiente óptimo, evitando que el lugar se vuelva demasiado caliente y reduciendo la posibilidad de sudoración excesiva, lo que puede interrumpir el sueño.

– Mejora de la calidad del aire: Ventilar la habitación al dormir puede reducir la concentración de dióxido de carbono (CO2) y otros contaminantes en el aire. Un ambiente con aire más limpio puede promover una respiración más saludable y un sueño más profundo. Otro estudios han demostrado la relación que hay entre este componente y la apnea obstructiva de sueño.

De acuerdo con la Mayo Clinic, este trastorno se produce cuando los músculos se relajan y se cierran la vía respiratoria de una persona mientras duerme. Esto puede reducir el nivel de oxígeno en la sangre y causar una acumulación de dióxido de carbono. El cerebro percibe esta dificultad para respirar y te despierta para que puedas volver a abrir las vías respiratorias y esto puede ocurrir múltiples veces en una noche.

Un trastorno que puede mantenerte despierto toda la noche. Foto: Freepik

– Sincronización circadiana: La exposición a la luz natural y las variaciones de temperatura durante la noche puede ayudar a sincronizar tu reloj biológico interno. Esto puede hacer que te sientas más alerta durante el día y más somnoliento por la noche, facilitando la conciliación del sueño.

Dormir con la ventana abierta es una práctica sencilla que puede tener un impacto significativo en la calidad de tu sueño. Las razones personales se combinan con las científicas, para crear un entorno propicio para el descanso.

Así que la próxima vez que te encuentres dando vueltas en la cama, considera abrir la ventana y dejar que la naturaleza te ayude a descansar mejor. Tu cuerpo y mente te lo agradecerán.

¡Buenas noches y dulces sueños!

Relacionados