El nacimiento de un hijo siempre es motivo de alegría pero para una comunidad en el condado de Palm Beach se ha convertido en todo un misterio que aún se intenta descifrar. La inexplicable muerte de un bebé en medio de un parto casero ahora apunta hacia la persona menos pensada: su propia madre.
El extraño suceso ocurrió en mayo de 2022 pero hasta ahora, más de un año después, se revelaron nuevos detalles escabrosos. La protagonista de esta historia es Bianca R. DeSouza actualmente de 21 años, aunque para el momento de dar a luz era una joven de apenas 19 años de edad.
La mujer residente en el condado de Palm Beach, específicamente en 19500 de Dinner Key Drive en “Boca Isles South” de Boca Ratón, quedó embarazada de su pareja, un soldado activo del Ejército de Estados Unidos. En un primer momento pensó en el aborto como opción, luego decidió dar al niño en adopción. El embarazo siguió avanzando sin que la joven definiera alguna familia aspirante para entregar el bebé.
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La Oficina del Sheriff de Palm Beach entrevistó a la madre tras la muerte del bebé, aunque esta dio pocos detalles del momento. De ese 2 de mayo de 2022, apenas recordó haber sentido dolores punzantes en su vientre que vinculó con posibles contracciones. Aunque la inducción del parto se pautó para el día siguiente, el momento del nacimiento había llegado aunque ella no estaba preparada.
Entonces dijo haber hado un gran empujón y sintió que el bebé salió de su cuerpo, incluso escuchó su llanto. Ella no buscó ayuda ni gritó, solo afirmó haberse quedado sentada en su cama sin cobijar al bebé que al cabo de un rato dejó de llorar. Poco después la joven decidió tomar una ducha.
La negligencia de una madre
El parto de Bianca R. DeSouza ocurrió en un día que su madre nunca olvidará. Según declaró a la policía, la señora llegó a casa y comenzó a gritar al ver al bebé inconsciente, lo que despertó a la joven. De inmediato 911 atendió la emergencia con socorristas que intentaron reanimar al recién nacido y lo trasladaron a un hospital donde poco después fue declarado muerto.
La ahora acusada dejó más dudas que respuestas en su declaración jurada, según citó NCB. Ni durante ni después del parto pidió ayuda, tampoco reaccionó ante el llanto de bebé. “Estaba confundida. Me quedé ahí sentada”, repitió varias veces a la policía. Tampoco supo de la muerte de su bebé hasta que llegó su madre a casa, agregó.
El informe forense en abril de 2023 indicó que la muerte del bebé se debió a asfixia. La madre, por su parte, había sido diagnosticada con esquizofrenia y trastorno bipolar, además de estrés postraumático. Durante el embarazo consumió alcohol, drogas y ansiolíticos, entre otras sustancias no recomendadas.
La policía local procedió a su detención el pasado viernes 8 de diciembre y la trasladaron a la cárcel del condado de Palm Beach. A la mujer se le acusó de homicidio involuntario agravado de un niño y negligencia infantil con grandes daños corporales. Poco después fue liberada con una fianza de 25.000 dólares.
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