La Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los republicanos, ha dado luz verde a un controvertido proyecto de ley contra la comunidad inmigrante. El documento busca la deportación de indocumentados que sean condenados por haber conducido bajo los efectos del alcohol.
El proyecto, denominado como H.R. 6976, fue aprobado este martes 1 de febrero, con 274 votos a favor. 150 demócratas votaron en contra pero no pudieron detener la medida.
El representante republicano Barry Moore de Alabama es el patrocinador de esta iniciativa. Establece que cualquier extranjero no estadounidense (según la ley federal) al que se le condene por conducir en estado de ebriedad puede enfrentar la prohibición de ingresar a los Estados Unidos o, en su defecto, la deportación.
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Moore enfatizó la urgencia de la medida al señalar que cada 45 minutos alguien en los Estados Unidos pierde la vida en un accidente relacionado con un conductor ebrio. No obstante, críticos del proyecto, incluyendo el representante demócrata Jerry Nadler de Nueva York, argumentan que los republicanos están utilizando la inmigración como un tema electoral en lugar de abordar eficazmente el problema.
Today, my legislation that forces President Biden to deport illegal immigrants who drive drunk or impaired passed the House.
I thank my @HouseGOP colleagues for joining me to protect American families by ensuring illegals who commit these offenses are off our streets. pic.twitter.com/y9G3Nea8Xi
— Rep. Barry Moore (@RepBarryMoore) February 1, 2024
¿Qué sigue ahora para los inmigrantes?
Nadler expresó su descontento durante el debate en el pleno, acusando a sus colegas republicanos de no buscar resolver el problema, sino de mantenerlo como un tema de campaña. Además, señaló que utilizar la inmigración de esta manera obstaculiza los esfuerzos para encontrar soluciones reales.
Por su parte, el representante de Florida, Daniel Webster, aseguró en la red social X, antes Twitter: “Es de sentido común, los inmigrantes ilegales que ponen en peligro la vida de los estadounidenses deben enfrentarse a la deportación y a la prohibición de entrar en nuestro país”.
Tras su aprobación en la Cámara Baja, el proyecto de ley pasa a discusión en el Senado, donde son los demócratas quienes controlan la mayoría. Sin embargo, el hecho de que más de 50 votos fueran de los demócratas en esta primera votación incrementa la expectativa. De aprobarse, pasaría a manos del presidente Joe Biden.
Esta legislación sería parte de una enmienda de la Ley de Inmigración y Nacionalidad que también se está discutiendo en el Congreso. Por ahora, la deportación se aplica a ciudadanos que hayan cometido delitos graves o que representen una amenaza para la seguridad nacional.
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