Univista

Tres mitos sobre el seguro de vida

Tener un seguro de vida puede ser crucial no solo para tus seres queridos, también es clave para tu propio beneficio.

Por Luisana Valdivieso
Tres mitos sobre el seguro de vida
Facebook Twitter Whatsapp Telegram

Alrededor del seguro de vida se han creado algunos mitos que lo hacen incomprensible para muchas personas quienes se privan de los múltiples beneficios de este importante instrumento financiero.

1- Solo es útil cuando uno muere

No es del todo así. Aunque este tipo de seguro, por lo general, se utiliza para beneficiar a los seres queridos que sobrevivan al asegurado, existen muchos tipos de seguros de vida que también benefician al propio asegurado. Por ejemplo, cuando una persona mayor con seguro de vida necesita dinero, puede sacarlo del beneficio de su propio seguro. Lo mismo pasa si el asegurado contrae una enfermedad crítica, crónica o terminal, en ese caso también puede cobrar parte de su beneficio de fallecimiento.

2- No necesito seguro de vida porque soy joven, saludable, soltero y no tengo hijos

Comprar el seguro siendo una persona joven y saludable garantiza que las primas sean bien baratas. Además si falleces, porque un accidente lo tiene cualquiera, tus padres no tienen que hacerse cargo de pagar tu entierro, tus deudas estudiantiles tu hipoteca, ni el préstamo de tu auto. Si quedas inválido, el seguro se encarga de pagarte de por vida.

3- El seguro es caro, es cosa de ricos

Existen muchas variantes de seguro de vida. Por lo general, no es caro tenerlo. Entre otros factores, el precio de la prima depende de la edad del asegurado, su estado de salud, el beneficio de fallecimiento que desee o el tipo de seguro (permanente o a término, este último es aún más barato).

Si tienes dudas sobre el seguro de vida, llama a los especialistas de Univista Insurane y evita creer en los mitos que por ahí circulan.

Relacionados