A la cárcel por violar el embargo a Cuba

Un hombre que según él intentaba ayudar al pueblo cubano facilitando su acceso a la internet, fue condenado a prisión por violar el embargo.

Por Redacción MiamiDiario

Bryan Evan Singer, de 46 años, trataba de contrabandear desde el sur de la Florida cientos de dispositivos electrónicos por lo que fue sentenciado por violar el embargo a Cuba a 78 meses de prisión.

Según un comunicado de la Fiscalía del Distrito Sur de Florida, Singer intentó viajar a la isla a bordo de una embarcación llamada “La Mala” el 2 de mayo de 2017. Las autoridades registraron la embarcación  antes zarpar de Stock Island y hallaron un compartimento oculto debajo de una cama atornillada en la cabina del barco.

En el compartimento se encontraban cientos de dispositivos electrónicos, entre ellos más de 300 Ubiquiti Nanostation Network M2, valorados en más de $30,000.

Cuando fue acusado, Singer calificó de “absurdos” los cargos, y agregó que no estaba contrabandeando, sino que lo hacía para “apoyar al pueblo cubano”. Según le dijo al Miami Herald había llevado varias veces mercadería a Cuba y que tenía una persona en la isla “para dejarla”.

Según el periódico desde que el gobierno cubano instalara las primeras zonas de navegación wifi en los parques de la isla en 2013, han aparecido decenas de redes clandestinas para brindar los servicios de internet desde la comodidad de los hogares.

El gobierno cubano prohíbe la importación de los Ubiquiti Nanostation Network y otros equipos que amplifican las redes wifi.

Los Ubiquiti Nanostation Network son dispositivos que permiten ampliar la señal wifi hasta varios kilómetros, por lo que suelen ser utilizados para brindar cobertura de internet en grandes conciertos o en zonas rurales. Cada uno de estos aparatos puede recibir o enviar señales wifi hasta 10 kilómetros a su alrededor.

“Estos dispositivos requieren una licencia para ser exportados a Cuba porque sus capacidades amenazan la seguridad nacional”, aclaró la Fiscalía. “Singer nunca buscó ni obtuvo una licencia para exportar estos aparatos a Cuba”.

Hasta el momento el país tiene alrededor de 700 puntos de conexión inalámbrica y el monopolio estatal, Etecsa, cobra $1 por hora de conexión.

Con información de El Nuevo Herald

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